Casi todos los fabricantes trabajan para ofrecernos tecnologías cada vez más adaptadas a nosotros, estrechando el entendimiento y la comunicación que tenemos con el vehículo. En ese sentido, el avance que nos presenta ahora Opel tiene que ver con un uso más adaptado de la iluminación.
Presentado bajo la etiqueta de tercera generación que perfeccionará a la actual Opel AFL+, la nueva tecnología aportará como prestación el seguimiento ocular. Es decir, que la iluminación variará en función del lugar donde posemos nuestra mirada, gracias a la incorporación de una sola cámara que vigilará nuestros ojos.
Opel insiste en el anuncio de su nueva tecnología que uno de los puntos a los que han dedicado más esfuerzo ha sido este, la utilización de una única cámara dirigida hacia la cabeza del conductor y que detecté los movimientos. Este logro que se atribuye Opel simplifica de forma versátil el sistema. Para ello, ha sido necesario optimizar de los parámetros de funcionamiento de la cámara usada y trabajar con el algoritmo de seguimiento ocular.
Durante el desarrollo se equipó a la cámara con sensores infrarrojos periféricos y fotodiodos centrales que otorgan un escaneo de los ojos del conductor de más de 50 veces por segundo en condiciones del atardecer y la noche.
Igualmente, se ha acelerado el procesamiento y transmisión, otro de los puntos débiles con los que hasta ahora contaban. Esto permite que la reacción de los faros se acerque más a una sensación de movimiento instantáneo en coordinación con la mirada. No tardaremos mucho en comprobar las virtudes y limitaciones de este nuevo sistema, pues el fabricante piensa comenzar a montarlo muy pronto en modelos de producción.
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