Posiblemente el mayor reto al que se enfrentan las compañías al apostar por la tecnología híbrida y eléctrica es el de que sus posibles clientes interioricen la idea de que un vehículo con este tipo de movilidad puede ser igual de apasionante que cualquier otro petrolero que se precie. De entre todo lo visto hasta ahora, la propuesta de Lexus me parece la más acertada.
¿Qué mejor forma de demostrar el potencial del Lexus GS Hybrid que poniéndolo al límite? Pues dicho y hecho, Lexus se llevó a los compradores potenciales del vehículo a una prueba en la que recorrían un circuito exprimiendo los 345 CV del coche y les invitaron a mantener sus pulsaciones lo más bajas posibles.
El resultado os lo podéis imaginar, con algunos participantes elevando sus pulsaciones hasta las 190 por minuto mientras el Lexus GS Hybrid atravesaba las curvas quemando ruedas y se ponía de 0 a 100 km/h en apenas 5,6 segundos. Lo mejor de todo, más allá del tema de las pulsaciones, es comprobar como una vez más se demuestra que la cara es el espejo del alma.
Nota: Gracias a Hudson8 por la pista.
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Vía | GreenAutoblog
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