Los vehículos eléctricos puros están exentos de emisiones contaminantes durante su vida, pero no tanto durante su producción. En el proceso "del pozo a la rueda" contabilizan también ciertos niveles de contaminación. Como ya os hemos contado, en ese contraste medioambiental con el resto de vehículos la movilidad eléctrica sigue ganando la partida.
Por eso nos llama y mucho la atención leer titulares como Tesla en California contribuye a las lluvias contaminantes en China. Publicado por Bloomberg, la toxicidad en la extracción de esta materia prima amenaza con desestabilizar en menor o mayor medida los costes de producción para los vehículos eléctricos.
Esto es así porque China produce y exporta una cuota elevada del total del grafito utilizado en la fabricación de baterías. Debido a la mencionada contaminación en su extracción, las autoridades del país han comenzado a suspender la actividad en muchas minas. En diciembre de 2013 se detuvieron 55 procesos de extracción de grafito en la provincia de Shandong. Estos corresponden al 10% de la provisión mundial.
Los fabricantes aguardan a la espera de lo que ocurra allí. Desde los años 80 no se han abierto nuevas explotaciones más allá de las fronteras chinas, pero esto podría cambiar pronto. Y es que el aumento en la demanda de grafito está asegurado a tenor de las previsiones de crecimiento en lo que se refiere a producción de baterías de iones de litio. Se estima que haya aumentando en un 52% en 2018.
Por eso, tanto su provisión como su precio son determinantes para el futuro del coche eléctrico: un incremento del 30% en el precio del grafito supondría aumentar el coste de las baterías en un 5%. Según Bloomberg, esto ralentizaría la esperada reducción de los precios de las baterías.
Para hacernos una idea, cada coche eléctrico lleva consigo unos 50 kilogramos de grafito, cada híbrido 10 aproximadamente, y una bicicleta eléctrica 1 kilogramo.
Visto desde la perspectiva de China, es una situación bastante irónica. Es muy cierto que la producción de grafito perjudica con lluvias ácidas y contaminantes, pero del mismo modo, y en mi opinión, no creo que sean los chinos los que "necesiten" poner trabas a la proliferación de los vehículos eléctricos. Sí, es una situación complicada. Claro que, otra historia diferente es que se estime sacar partido económico de todo esto.
Fuente | Bloomberg Foto | Flickr En Motorpasión Futuro | China quiere más coches eléctricos, Contaminación excesiva, ¿el precio del "progreso"?
