Con sus más de 1.100.000 km recorridos, el coche autónomo de Google va aprendiendo a circular no solo por carreteras, autovías y autopistas sino también por las zonas más complicadas de las ciudades, en donde tiene que estar atento a cientos de situaciones simultáneamente: peatones, autobuses, ciclistas, obras, coches parados ocupando carriles de circulación, señales realizadas por guardias, etc.
Esta combinación de situaciones, que pueden representar cada una de ellas un peligro, a veces hasta son difíciles de controlar por un conductor experimentado, mientras que para un ordenador al que se le han introducido todas las situaciones posibles y se ha programado convenientemente no resulta para nada complejo de controlar.
El software que usa Google en su vehículo autónomo ha sido ahora actualizado, después de haber recorrido todos esos kilómetros, para poder recorrer las calles de las ciudades. El software puede ahora detectar cientos de objetos que se mueven al mismo tiempo y reaccionar ante ellos, tras haber introducido los ingenieros encargados del desarrollo del sistema los modelos de reacción adecuados a cada una de las situaciones posibles.
Aún así seguro que siguen quedando algunas situaciones que no habrán sido tenidas en cuenta, al no haberse tenido que enfrentar a ellas, a pesar de todos esos kilómetros recorridos y para lo cual el vehículo no ha sido programado, lo cual no tiene que significar que lleve inexorablemente a un accidente, pero si a una situación que, a lo mejor, podría haberse resuelto de una manera más satisfactoria y Goggle no quiere dejar ningún cabo sin atar antes de lanzar su sistema, para lo cual seguirá haciendo kilómetros y kilómetros.
Vía | Autoblog Vídeo | Google mediante YouTube En Motorpasión Futuro | El coche inteligente de Google ya es una realidad legal en EE.UU