Nuestro Gobierno ha “descubierto” recientemente que los precios del combustible son muy impopulares, juntándose el máximo histórico (tres consecutivos de momento) con la mayor carga impositiva por el IVA al 21% y los céntimos sanitarios que aplican la mayoría de las Comunidades Autónomas.
De los tres componentes que regulan el precio —coste de la materia prima, impuestos y lo que se llevan las petroleras— los dos primeros son similares en la Unión Europea, pero resulta que los márgenes comerciales son superiores. Eso significa que, antes de impuestos, tenemos uno de los combustibles más caros de Europa, ¿por qué?
Ya sabíamos que el Gobierno estaba investigando las causas, paralelamente a la eliminación de barreras de entrada para nuevos competidores. La novedad de hoy es que se estudian “medidas impositivas” para ajustar dichos márgenes y homologarlos con la UE, esta vez para bien.
Según el último boletín petrolero de la UE, en España el litro de gasolina 95 cuesta 1,522 euros/litro (media europea 1,693) y el gasóleo 1,444 euros/litro (media europea 1,536). De esas cantidades, en España 15 céntimos son de margen comercial, en la UE son 13,7 céntimos para gasolina y 13,3 céntimos para gasóleo.
Si además metemos en la ecuación el poder adquisitivo, tenemos de los combustibles más caros de Europa, aunque podría ser peor, como en Grecia o Portugal. Homologar sueldos a lo largo de la UE es difícil de cambiar, pero los márgenes comerciales ya son otra cosa. Estamos hablando de intervención en precios.
De todas formas, también pienso que esto es una maniobra de distracción del Ejecutivo. Esos márgenes superiores llevan ahí mucho tiempo. Supongamos que mañana mismo los recortan a nivel europeo, casi 2 céntimos por litro menos, con el IVA han subido más, así que no llega siquiera a lo comido por lo servido.
De todas formas, esta es una noticia positiva, visto el panorama.
Vía | El Mundo
