La Fórmula 1 está de vacaciones desde el pasado fin de semana pero hay un piloto que aún está trabajando, Sebastian Vettel. Ferrari tenía planificado junto a Pirelli unos test de neumáticos en Fiorano sobre asafalto mojado para seguir con el desarrollo de los compuestos de lluvia extrema e intermedios para la próxima temporada, a principios de esta semana.
El lunes y martes fue el turno del piloto alemán que dio el relevo al piloto de Red Bull Sebastien Buemi que se puso a manos del monoplaza de las marca de bebidas energéticas en el también circuito italiano de Mugello. El Campeón de la Fórmula E, centró su trabajo en los nuevos slicks de 2017 que tuvo el placer de ser el primer piloto en probar.
Estos test nos han permitido ver en pista a los nuevos neumáticos un 25% más anchos que los actuales. Según dicta la normativa de 2017 los Pirelli serán de 305/670-13 el delantero (actualmente 245/660-13) y de 405/670-13 el trasero (frente a las 325/660-13 actuales). Los neumáticos intermedios tendrán 675 mm de ancho mientras que el Cinturato (lluvia extrema) tendrá un diámetro de 680 mm.
Ferrari adaptó para la ocasión un SF15-T con el que Sebastian Vettel dio varias vueltas la trazado de Maranello que fue captado por aficionados locales que no quisieron perderse la oportunidad de ver al cuatro veces Campeón del Mundo en pista.
El primer test de muchos
Estos test forman parte de un extenso programa de pruebas que Pirelli exigió a la organización de la Fórmula 1 para renovar su contrato como proveedor único de neumáticos de la categoría. De esta forma el fabricante italiano confía en llegar preparado a la próxima temporada y evitar situaciones de desprestigio para la marca como las vividas en los últimos en los que se ha puesto en entredicho su trabajo.
Los siguientes entrenamientos tendrán lugar en septiembre en Barcelona con Ferrari en los que probarán los slicks.