Primer contacto con el CUPRA León: más sofisticado, premium y de aspecto deportivo que el anterior
El nuevo CUPRA León ha sido presentado hace unas horas. El segundo modelo de la gama llega con dos carrocerías y tres motorizaciones. Pronto, en unas semanas podremos ver el CUPRA Formentor, un modelo exclusivo para CUPRA (aseguran desde la marca que posteriormente no tendrá versión SEAT).
Así, a finales de año cuando se comercialicen tanto el León como el Formentor, la marca contará ya con tres modelos. Pero antes de poder probar estos nuevos modelos, pudimos sentarnos y trastear a bordo de un CUPRA León e-hybrid y un CUPRA León Sportstourer.
El debut del nuevo CUPRA León, acompañado de las dos versiones de competición (una con un 2.0 litros gasolina de 340 CV y otra eléctrica de 680 CV), es también el verdadero inicio de la marca CUPRA. Con tan solo dos años de existencia y un solo modelo en lucir el logotipo CURPA -el Ateca- y otro a caballo de SEAT, el León saliente, la marca ha conseguido vender 40.000 coches a nivel global.
Lo cual es una muy buena cifra habida cuenta que CUPRA está presente básicamente en Europa y México, donde, por cierto, uno de cada tres León vendidos es un CUPRA. Normal que en esas condiciones la marca haya abierto su primer concesionario exclusivo CUPRA en la capital americana.
Ahora, el objetivo para la marca es crecer más allá del automovilista que busca un modelo deportivo. Y la idea es ofrecer un producto muy diferenciado de la gama SEAT y del mercado en general. Así, a los valores de deportividad asociados tradicionalmente a CUPRA se añaden el diseño, evidenciado por los colores disponibles en la gama (principalmente gris mate, azul mate, negro, rojo y blanco perlado) y el color cobre del logotipo y de los detalles, un color muy dificil de combinar. CUPRA quiere atraer a una clientela sensible al diseño, a la tecnología y joven de mente, que no desea necesariamente pasar por el aro de las tres marcas premium alemanas.
El objetivo final es que se habla de un CUPRA, sea cual sea, y no de un León CUPRA, como hasta ahora. Salvando las distancias, es conseguir lo que Daimler logró com AMG, que la marca o división sport sea más importante y valorada que el propio modelo. Al final, para mucha gente le da igual que su AMG sea un A35 que un A45 S, es un AMG.
De ahí la presencia de variantes de 245 CV en la gama. Y es que hay mercados fuera de España, como Francia o Alemania, donde algunos impuestos sobre vehículos nuevos van en función de las emisiones de CO₂ y donde cada g/km cuenta. Así, en esos mercados la diferencia de precio final entre una versión de 245 CV y una de 300 CV puede ser más que notable.
Son los detalles los que marcan la diferencia
Para su primera aparición ante los medios, CUPRA nos enseñó las dos versiones más destacables de la nueva gama León: el e-hybrid de 245 CV, con carrocería de cinco puertas, y el Sportstourer de 310 CV y carrocería familiar. Aunque la gama final de motores se compondrá de un PHEV de 245 CV y de tres gasolina (245 CV, 300 CV y 310 CV), todos asociados exclusivamente a un cambio automático de doble embrague.
Si bien el diseño general (parachoques y faldones) no difiere mucho entre las diferentes versiones, hay detalles propios a cada versión que marcan la diferencia. Empezamos por los más llamativos, las llantas. El e-hybrid equipa unas llantas de aleación muy aerodinámicas que me recuerdan a las míticas BBS Turbofan de competición de los años 80. No sabemos todavía si serán de serie o en opción, pero sí estarán disponibles.
Las versiones gasolina, en principio, no pondrán contar con esas llantas aerodinámicas y optarán por las clásicas llantas abiertas multibrazo que vemos en el Sportstourer. En el CUPRA León de 245 CV serán de 17 pulgadas (19 pulgadas en opción) y en los de 300 CV y 310 CV, serán de 19 pulgadas. En principio, no habrá posibilidad de llantas de 20 pulgadas en ninguna versión.
Las colas de escape serán otro elemento diferenciador que permitirá determinar qué versión es de un solo vistazo. Los CUPRA León e-hybrid contarán con dos salidas dobles cuadradas, muy al estilo de AMG, con borde color cobre meramente estéticas. Es muy evidente que son salidas falsas, CURPA no pretende engañar. Son meramente estéticas y asumidas como tal.
Las versiones gasolina de 245 CV contarán con dos salidas, una a cada lado, mientras que las de 300 CV y 310 CV, contarán con dos salidas dobles. Y en estos casos, sí son escapes de verdad, obviamente.
Por último, no puedo pasar por alto que la versión e-hybrid nos pareció que tenía una altura libre superior a la del Sportstourer y sin embargo desde la marca aseguran que el coche está bajado con respecto a un SEAT León. Habrá que comprobarlo más adelante.
Espacio y diseño minimalista a bordo
Una vez dentro del CUPRA León las diferencias con respecto a un SEAT León son mínimas, pero destacables. Por ejemplo, el volante. Ya no es el volante del SEAT con un logotipo CUPRA, como puede ser el caso en el Ateca, sino que tiene su propio diseño central y cuenta con dos botones circulares: uno para encender el coche y el otro marcada del logotipo de la marca para seleccionar uno de los modos de conducción (Confort, Normal, CUPRA y personalizable).
Los asientos delanteros serán, en toda la gama, exclusivamente de tipo semibaquet. El diseño es espectacular y los materiales empleados, tanto en la tapicería de cuero, como en el marco cromado del hueco que evoca el lugar por donde pasarían los arneses en un coche de competición, son de excelente factura. La calidad percibida es alta. Además, son asientos muy cómodos, envolventes y de los que es muy fácil entrar y salir.
De hecho, en todo el coche, la calidad percibida es muy halagüeña, acercándose a un aspecto premium, aunque todavía hay algunos plásticos que tacto duro y demasiado brillantes a la vista que pueden rebajar la sensación final. Es particularmente evidente en los bordes del túnel central.
Este es mucho más alto que en el León saliente y separa descaradamente conductor de copiloto, es muy del estilo del Porsche Panamera. Una sensación a la que contribuye también el diminuto selector del cambio de doble embrague “shift by wire”, es decir, controlado electrónicamente y sin conexión física. (Que todos los sistemas del coche sean by wire, por cable, es el paso previo para que sean compatibles con la conducción autónoma).
El resto del salpicadero es también similar al del SEAT León, presidido por una pantalla central que lo controla todo, incluyendo el climatizador, pue sno hay botones físicos para ello. Y si bien puede resultar atractivo desde un punto de vista de diseño el simplificarlo todo, es también un problema para la ergonomía.
En algunos aspectos, la ausencia de botones físicos es un atraso que no ayuda en la conducción. Es más, citando a Josep Camós, “la diferencia entre un control manual y uno táctil es crucial en seguridad vial.” (Te explicamos en detalle por qué aquí)
En términos de conectividad, el coche es compatible con Apple CarPlay y Android Auto, pero con una diferencia notable. En el caso de Apple podrá ser sin cable, mientras que en Android será obligatoriamente por cable USB. Por cable USB C, concretamente. El que nuestros compañeros de Xataka han descrito como “el peor estándar de la historia porque es de todo menos estándar”. Y de las cuatro tomas USB que he visto en el coche (dos delante y dos detrás), todas son de tipo USB C.
En términos de habitabilidad, el León se posiciona como una de las referencias del mercado. Tanto en anchura como en espacio para las piernas, hay sitio de sobra incluso para quienes midan más de 1,90 m. A destacar que en las versiones e-hybrid, el maletero pierde capacidad con respecto a un Léon gasolina, siendo donde menos se nota en el Sportourer, que incluso con motor e-hybrid conserva un maletero de más de 500 litros.
Par saber cómo se comportan en carretera y si realmente el e-hybrid conserva ese tacto deportivo, tal y como desde la marca insisten que posee, habrá que esperar unos meses. La comercialización del CUPRA León comenzará en la segunda mitad del año.
El siguiente paso para CUPRA será la presentación en el Salón de Ginebra del Formentor de serie. Compartirá plataforma MQB con el León y motorización e-hybrid de 245 CV. Pero no será el único motor disponible en el Formentor a lo largo de su vida comercial.
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