La conducción autónoma es vista como la siguiente gran evolución de la movilidad, una innovación que traerá una nueva revolución industrial en muchos sectores. Sin embargo, seguimos estando lejos de una
El 6 de abril, un camión de conducción autónoma equipado con tecnología de TuSimple decidió repentinamente girar hacia la izquierda, atravesando la autopista I-10 en Tucson, Arizona, para luego estrellarse estrelló contra la mediana de hormigón. A bordo, iban un conductor y un ingeniero de TuSimple que no resultaron heridos, aseguran desde la empresa.
El accidente, no se hizo público hasta el pasado mes de junio después de que TuSimple presentara un informe sobre el incidente, recuerda The Wall Street Journal. Este accidente vuelve a poner en tela de juicio los tiempos en los que se quieren desplegar los vehículos autónomos sin necesidad ya de supervisión.
Si bien sigue habiendo dudas con cada accidente, por muy leve que sea, cuando se trata de un coche autónomo, las dudas se disparan cuando se trata de un semirremolque de más de 40 toneladas, lanzado por una autopista.
Aunque en el caso de este incidente, el diario subraya las preocupaciones de varios analistas independientes y de más de una docena de ex empleados de la empresa acerca de la rapidez con la que TuSimple quiere explotar comercialmente sus camiones autónomos, sin nadie detrás del volante. A principios de año, quería desplegar su flota esta misma primavera.
Un portavoz de TuSimple dijo que la seguridad es una prioridad para la empresa y que nadie resultó herido en el accidente. Sin embargo, la administración federal que regula los camiones y autobuses en Estados Unidos abrió una "investigación sobre el cumplimiento de la seguridad" en TuSimple.
¿Error humano o fallo técnico?
TuSimple alega que el accidente se debe a un error humano, recordemos que a bordo había un conductor y un ingeniero. Los detalles desvelados por la autoridad regulatoria, junto con documentos internos de TuSimple, muestran lo que serían “problemas fundamentales” con la tecnología de la empresa, es decir, fallos estructurales en la tecnología utilizada por la startup.
El Wall Street Journal tuvo acceso a un informe interno de TuSimple acerca del accidente. Según este documento, el semirremolque giró bruscamente a la izquierda porque una persona en la cabina no había reiniciado correctamente el sistema de conducción autónoma antes de ponerlo en marcha, lo que hizo que ejecutara una orden obsoleta.
La orden de giro a la izquierda del sistema tenía dos minutos y medio de antigüedad, y eso es una eternidad a velocidades de autopista (a 90 km/h se recorren más de 3,7 km en ese tiempo), y debería haber sido borrada del sistema, pero no lo fue, según el relato interno.
Sin embargo, los investigadores de la Universidad Carnegie Mellon (pioneros en la conducción autónoma) aseguran que fue el sistema de conducción autónoma el que giró el volante y que culpar de todo el accidente a un error humano sería faltar a la verdad. Y añaden que las seguridades habituales en estos sistemas habrían podido evitar el accidente si se hubieran aplicado.
TuSimple fue creada en 2015 y se ha convertido estos últimos años en el líder de la conducción autónoma de camiones. Tanto que se ganó el respaldo de socios como UPS, el gigante del transporte estadounidense U.S. Xpress Enterprises Inc. y Volkswagen AG.
En la actualidad, la empresa con sede en San Diego tiene operaciones en Arizona, Texas y China. Hace un año, TuSimple estuvo bajo los focos al haber logrado con éxito un trayecto de más de 1.600 km en conducción autónoma en 14 horas para entregar sandías: 10 horas menos que con un camionero al volante.
