Por fin llega el frío y aprovechamos para contarte todo lo que tienes que saber para moverte con seguridad y, además, cuidar de tu coche para mantenerlo en las mejores condiciones.
Es lo que toca: el frío, la nieve, las ventiscas, mala visibilidad, en fin… una serie de situaciones que, sin duda, afectan mucho a la conducción. Nada que no podamos prevenir o, al menos, tratar de hacer todo lo posible para que nuestros desplazamientos sigan siendo seguros.
Vamos a dar un repaso a todo lo que nos puede hacer afrontar esta temporada con éxito.
Neumáticos de invierno: ¿Son una buena opción?
Esta suele ser la primera inquietud de muchos conductores porque los neumáticos son uno de los elementos cruciales de cara a la seguridad.
El contacto del neumático con la carretera es clave, para ello la carretera y el neumático tienen que estar coordinados, por ejemplo, por caminos de tierra, funcionarán mejor los neumáticos de tacos que los lisos, lo contrario que ocurre cuando circulamos por una pista completamente lisa.
Los neumáticos de invierno son una buena opción en regiones frías
En el caso del frío, el elemento a tener en cuenta es la temperatura, y aquí juega un papel importante la composición del neumático, ya que por debajo de los 7 grados centígrados el neumático de verano se endurece y pierde flexibilidad y adherencia, algo que se soluciona con el neumático de invierno.
Gracias a composición y a una banda de rodadura diferente con un dibujo mucho más recortado y unas hendiduras más profundas, se consigue un mayor agarre a bajas temperaturas y una evacuación mayor de agua.
¿Cómo usar las cadenas?
Existen diferentes tipos de cadenas en el mercado, independientemente de la que elijas, lo importante es que la que utilices tenga la medida adecuada para tu neumático. Debemos tener claro es que todos los tipos de cadena se montan en las ruedas motrices.
¿Sabes como poner las cadenas? Prueba a hacerlo antes de que llegue el momento
Si el vehículo es de tracción 4×4 o tracción integral, como caso del Toyota RAV4 Electric Hybrid, lo ideal es montar las cadenas en los cuatro neumáticos. En caso de disponer sólo de un juego de dos cadenas, es preferible instalarlas en el eje delantero.
No se debe superar la velocidad de 40 km/h para mantener la integridad de las cadenas y de los neumáticos.
Por último, retira las cadenas en cuanto salgas de la nieve, así evitarás romperlas, o dañar tus ruedas o la propia carretera. Esta es una de las grandes ventajas de los neumáticos de invierno, ya que este tipo de neumáticos te permiten circular sobre asfalto sin nieve o hielo.
La puesta en marcha: la batería en invierno
Un momento crítico es cuando iniciamos la marcha después de que el coche haya estado parado durante un tiempo, el coche está frío, le cuesta arrancar y seguramente tengamos una capa de hielo en el parabrisas.
Un mantenimiento adecuado evita muchos problemas mecánicos y eléctricos
Es más que recomendable, antes de que lleguen los fríos, verificar el estado de la batería. Existen dispositivos para medir su capacidad.
En invierno, al estar el motor y el aceite a muy baja temperatura, la demanda de potencia para arrancar es mayor, en casos de necesidad, un arrancador portátil puede ser una buena solución, se trata de una batería externa que se conecta a la del coche con unas pinzas y permite arrancar el coche sin necesidad de ser ayudado por otro vehículo.
Otra opción para mantener la carga es utilizar un cargador que devuelva parte de la capacidad perdida a la batería. Este accesorio permite conocer el nivel de carga e indica cuál debería ser el correcto en función de la temperatura exterior.
Se trata de un dispositivo muy cómodo, ya que se puede conectar sin necesidad de quitar la batería del coche. Aunque, en cualquier caso, si la batería falla, lo mejor es sustituirla por otra nueva para evitar problemas.
Conductor y ocupantes: el peligro de las prendas de abrigo
Hasta que se consigue una temperatura agradable dentro del vehículo pasa un tiempo, sobre todo si hace mucho frío en el exterior. Pero hay que evitar algunas malas costumbres como meterse con los abrigos puestos dentro del coche o incluso los guantes.
No conduzcas con prendas de abrigo o guantes que dificulten la conducción
En el primer caso el motivo es doble, por una parte, el espacio que ocupa un abrigo (sobre todo si es grueso) entre nuestro cuerpo y el cinturón de seguridad es importante, creando un espacio que hace que el ajuste de la banda no sea el óptimo. Esta recomendación se ha de aplicar, con más esmero si cabe, en el caso del ajuste de los más pequeños en sus sillitas.
En el caso de los guantes, aquí el consejo va para el conductor ya que los guantes pueden provocar que no se sujete el volante correctamente.
Por último, una vez que se ha alcanzado la temperatura, para quitarse un abrigo dentro del coche es necesario quitarse el cinturón, con el peligro que esto conlleva. Existen accesorios como mantas térmicas o fundas de asientos calefactados que se pueden utilizar en esta época.
Conducción en invierno
En invierno, es importante extremar las precauciones al conducir. La nieve y el hielo pueden hacer que las carreteras sean resbaladizas y peligrosas. Aquí van algunos consejos que tener en cuenta para conducir en condiciones invernales:
- Conducir despacio y con cuidado.
- Aumentar la distancia de seguridad con el vehículo precedente.
- Evitar maniobras bruscas, acelerar y frenar suavemente para evitar derrapes.
- Utilizar siempre los intermitentes al girar o cambiar de carril.
- Usar marchas largas.
- Garantizar la visibilidad, no iniciar la marcha hasta que el parabrisas está completamente limpio y sin hielo.
Finalmente es conveniente desactivar el control de crucero, con el fin de mantener siempre el control del vehículo. En este periodo es frecuente encontrar imprevistos como placas de hielo, charcos, etc. Y se podría producir aquaplaning.
Más vale prevenir
Esto es muy importante, porque en algún caso puede ser que tengamos que aplazar el viaje. Antes de iniciar la marcha se debe consultar el estado de la carretera. La DGT dispone de un servicio actualizado que podemos consultar.
Si finalmente decidimos realizar el trayecto, os recomendamos:
- Llenar el depósito de combustible, ya que la calefacción solo funciona con el motor encendido y en caso de una retención o parada será necesario para mantener la temperatura del habitáculo.
- Llevar el teléfono cargado, con los teléfonos de la aseguradora localizados y mantenerse informado durante el trayecto.
- Sin ánimo de ser alarmistas, ni de quitar espacio en el maletero para el equipaje, también es aconsejable llevar mantas, linterna, un pequeño botiquín, rasqueta para quitar el hielo y algo de comida y agua.
Esperamos que no, pero siempre hay la posibilidad de que nos quedemos bloqueado en algún lugar. En el caso del invierno, hemos de aplicar más que en cualquier otra época la máxima de "más vale prevenir, que curar".
Imágenes: DGT, Unsplash | Katie Musial Pixabay| PublicDomaniPictures, Skitterphoto, RyanKingArt, Ebowalker, fancycrave1.