La fiebre de resucitar antiguas denominaciones sigue en pleno auge en Estados Unidos, o eso parece confirmar la aparición en el mercado el próximo otoño del 2007 Dodge Charger SRT8 Super Bee. En vistas del éxito que están teniendo ciertas resurreciones automovilísticas en USA, es una buena opción para incrementar su couta de mercado, algo baja para las grandes marcas americanas en los últimos tiempos.
Será la primera edición especial del Charger SRT8, pintado con Detonator Yellow y el capó en negro, marca distintiva de los antiguos Charger Super Bee. Y no pueden faltar los vinilos con la “abejita” en los laterales, así como los detalles interiores en amarillo de los asientos, volante y pomo del cambio. El motor será el HEMI V8 de 6.1 litros de 425 CV y 569 Nm de par máximo, el mismo que el concept del Dodge Challenger.
En 1968, el apelativo apareció como tope de gama para el Dodge Coronet, para hacer frente a un rival bastante rápido, el Plymouth Road Runner. Su última aparición en el mercado fue en el Charger del 71. Ahora es un modelo cotizadísimo, alcanzando precios desorbitados y exclusivos para coleccionistas, rondando los 100.000 dólares.
Vía | Combustion Chamber (en inglés)
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