Vivimos en una época en la que queremos viajar en el tiempo, pero aún no hemos aprendido siquiera a sacarle provecho a cada una de las horas del día. El Volvo Concept 26 es una máquina del tiempo que no nos lleva ni al pasado ni al futuro; nos deja donde estamos porque es fiel a su idea de que viajar en el tiempo es posible si aprendemos a sacarle partido a cada uno de esos minutos que pasamos estancados en el tráfico.
El prototipo, desvelado en el Salón de Los Ángeles, en realidad es el habitáculo de un coche autónomo. Su propuesta va sobre todo lo que podemos hacer mientras el vehículo se conduce a casa o al trabajo, y cómo una configuración versátil de asientos nos puede facilitar la existencia.
El habitáculo está conformado por una mesa plegable, una pantalla de 25 pulgadas, un tablet instalado en la consola central y asientos ajustables. En conjunto, estos elementos pueden modificar su posición o funcionamiento dependiendo el modo de operación seleccionado:
- Drive: Para 'los puristas' que aún quieran hacerse cargo del control del coche
- Create: Las diferentes configuraciones de este modo le permiten al conductor leer, trabajar en algún proyecto pendiente o buscar noticias en Internet.
- Relax: Bajo este modo, los asientos reclinables le permiten al conductor tomar un descanso, relajarse y, si lo desea, ver alguno de los contenidos sugeridos a través de la pantalla.
Conducir puede seguir siendo deportivo, siempre y cuando se haga en el coche adecuado, el día adecuado y en el camino adecuado. Esa es la idea bajo la que el Volvo Concept 26 propone un nuevo estilo de vida, en el que no perdamos ni un minuto de nuestro tiempo. Hacer que el coche sea una extensión de nuestra casa o de nuestra oficina está a un paso de volverse realidad.
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