Hoy por hoy, puedes comprar a golpe de click todo tipo de accesorios para personalizar tu coche, incluidos muchos que sirven para falsificar algunos de sus componentes, desde pegatinas para que las llantas parezcan de ciertas marcas a logotipos falsos para los altavoces.
Lo que no esperas es encontrar uno de estos logotipos falsos en los altavoces de tu Volvo nuevo, pero es lo que le ha pasado al dueño de un Volvo S60 comprado en China. Lo peor es que no es el único que se ha enfrentado a este problema.
Volvo ha abierto una investigación para aclararlo todo
Desde hace décadas, las empresas especializadas en audio trabajan con los fabricantes de coches para equipar a ciertos modelos con sus sistemas de sonido. B&O Play, Harman Kardon, JBL, Bose, Burmester, Sonos, Devialet o Bowers & Wilkins son solo algunas de las compañías que colaboran con las marcas de automóviles y lo cierto es que cuando se ve la firma de una de estas marcas en los altavoces de un coche, suele ser sinónimo de una calidad de sonido superior. Aunque últimamente puede ser trampa.
Hoy por hoy, es fácil comprar falsificaciones de prácticamente cualquier cosa y los logotipos de estas compañías de audio no son una excepción. Tiendas como AliExpress o Temu venden pegatinas falsas de reconocidas marcas de sonido para ponerlas en los altavoces de cualquier coche y hacerlos pasar por unos fabricados por estas marcas.
Por muy poco dinero es posible comprar anagramas autoadhesivos de Harman Kardon o de Bose. Lógicamente, se trata de un “quiero y no puedo” de manual porque poniendo esas pegatinas no mejora el sonido del sistema de audio, pero sirven para aparentar que el coche está equipo con un sistema de sonido de estas compañías.
Lo malo es cuando compras un coche nuevo que teóricamente sí está equipado con un sistema de sonido de renombre y viene con este tipo de pegatinas. Puede parecer una broma pesada, pero es lo que le ha pasado al dueño de un Volvo S60, de hecho, es incluso peor que encontrarse con una pegatina de Temu o AliExpress porque, en este caso, el logotipo que llevaban los altavoces de su coche ni siquiera estaba bien hecho.
Según cuenta Ars Technica, el dueño de este Volvo S60 se dio cuenta de que los altavoces de su coche no eran realmente de Bowers & Wilkins y, en lugar de llevar el logotipo de la marca británica, llevaban uno en el que el nombre de esa compañía estaba mal escrito: ponía “Bowers & VVilkins” (La ‘W’ Wilkins se había cambiado por dos ‘V’). Sohu publicó la foto de este anagrama falso.
Cuando expuso el problema al distribuidor de Volvo que le había vendido el coche, este dijo que no notaba diferencia entre ‘W’ y ‘VV’ y que no había ningún error tipográfico, así que rechazó darle una solución. Lo peor de todo es que el mismo usuario también reportó que la palanca de cambios de cristal y retroiluminada de su Volvo tampoco era original, hasta el punto de que ni siquiera tenía retroiluminación.
Lo siguiente que hizo el dueño de este Volvo es exponer su caso en internet. Fue entonces cuando aparecieron otros dueños de Volvo comprados en China que reportaron el mismo problema, de manera que la división china de la marca sueca se ha visto obligada a emitir un comunicado, aunque todavía no se ha aclarado si compraron sus coches en el mismo concesionario y si se trata, en todos los casos, de un Volvo S60 o también están afectados otros modelos de la marca.
Volvo Cars publicó el comunicado en la red social china Weibo el pasado 12 de febrero: “Volvo Cars se toma muy en serio el problema del ‘comportamiento irregular en el proceso de venta de vehículos nuevos’ que algunos clientes han denunciado recientemente. Pedimos disculpas sinceras por los problemas y las molestias que este incidente ha causado a nuestros clientes. Volvo Cars siempre está del lado de sus clientes y nunca tolerará ningún comportamiento que perjudique los intereses de los usuarios”.
“Después del incidente, Volvo Cars inició inmediatamente una investigación especial. Defenderemos los principios de apertura y transparencia, investigaremos exhaustivamente la causa del incidente y lo manejaremos adecuadamente de acuerdo con las leyes y regulaciones para garantizar que los derechos e intereses legítimos de nuestros clientes estén completamente protegidos”, aclara la marca sueca.
“Volvo Cars implementa un estricto sistema de gestión de trazabilidad integral para los accesorios originales. Todos los accesorios originales cumplen con los estándares de calidad unificados a nivel mundial, lo que ofrece a los clientes una experiencia de conducción segura y sin preocupaciones. Volvo Cars siempre ha estado centrado en el cliente y comprometido a ofrecer productos y servicios seguros y confiables. En el futuro, fortaleceremos aún más la supervisión y gestión de los distribuidores autorizados, estandarizaremos integralmente los estándares y procesos del servicio de ventas y protegeremos eficazmente los derechos e intereses legítimos de cada cliente”, añade Volvo en su comunicado.
De momento, no hay ninguna explicación de qué ha podido pasar para que algunos usuarios tengan este anagrama falso en su coche. Es algo difícil de entender y más en una marca de la talla de Volvo. Lo más probable es que no sea un problema de la marca, sino de alguno o algunos de los concesionarios que tiene la compañía en China. Quizá, el responsable de ese concesionario vio la idea en el foro de Volvo ‘swedespeed’ y creyó que estaría bien hacer lo mismo.
En cualquier caso, es un problema que afecta directamente a la imagen de la marca porque debería tener una supervisión absoluta de su red de concesionarios y de lo que se hace en cada uno de ellos.
Imágenes | Volvo, Sohu y Temu
