Mientras el Dieselgate sigue coleando, Volkswagen moldea un futuro silencioso en el que los coches eléctricos son la piedra angular. Y en medio de ese plan de expansión y 'democratización' se encuentra ahora mismo el Volkswagen ID.3, cuya versión definitiva conoceremos en el Salón de Frankfurt 2019.
En recientes declaraciones del vicepresidente senior del Grupo Volkswagen, Reinhard Fischer, la firma alemana está convencida de que pronto los coches alimentados por combustibles fósiles costarán lo mismo que los eléctricos: "El punto de inflexión está cerca", ha dicho.
Sin línea temporal de momento
El consorcio alemán está invirtiendo 50.000 millones de dólares en su ofensiva eléctrica, que incluye una fábrica propia de baterías, el despegue de la familia ID y la instalación de 36.000 puntos de carga para coches eléctricos en Europa.
Volkswagen está de acuerdo en que la electromovilidad es el futuro irremediable, pero en lo que no consigue ponerse de acuerdo es en si será asequible.
Las últimas declaraciones de Fischer durante un seminario en Michigan vaticinan que sí lo será: "Creemos firmemente que el punto de inflexión está cerca, y ese punto de inflexión será la equidad de los precios".
La fuerte inversión en tecnología eléctrica propiciará la producción a gran escala y con ella la reducción de costos, hasta el punto de conseguir la paridad de precios entre los vehículos de combustión y los eléctricos, según el responsable de la firma. "Una vez superas el miedo a algo nuevo, el coche eléctrico es la mejor opción", dice.
Lo cierto es que la campaña promocional de la familia ID de coches eléctricos de Volkswagen ha aterrizado con la promesa de que serán "para todos".
Con el lanzamiento su primer coche 100 % eléctrico, el Volkswagen ID.3, el fabricante ha dicho que será un coche "para millones y no para millonarios", pero ha decidido lanzar primero una edición limitada de 40.000 euros en Alemania antes que la versión de acceso, de 30.000 euros.
Con unos precios de salida lejos de ser 'democráticos', los alemanes aún no se han puesto de acuerdo en este aspecto. Herbert Diess no dudó en decir durante un debate televisado por la cadena ZDF que para 2020 tendrán vehículos eléctricos tan capaces como los de Tesla por la mitad de precio.
A su rescate tuvo que salir el presidente de la junta supervisora, Hans-Dieter Poetsch, para aclarar que la electrificación conducirá "inevitablemente a aumentos significativos de precio en el segmento de los vehículos más pequeños".
Con las barreras del precio, el miedo a quedarse sin batería y el desconocimiento que aún existe respecto a los coches eléctricos, a los fabricantes no les queda otra que superarlas.
El grupo de 12 marcas de Volkswagen dijo en marzo que planea introducir casi 70 modelos totalmente eléctricos en todo el mundo para 2028, lo que representa 22 millones de vehículos.
Quizá para entonces sí podamos hablar de democratización.