La Asociación Española de Entidades Colaboradoras de la Administración en la Inspección Técnica de Vehículos (AECA-ITV) acaba de presentar un “análisis del estado del parque móvil en España”, que ya cuenta con una edad media de 14,9 años, a partir de los datos recogidos en las inspecciones técnicas durante todo 2022.
Según sus datos, “el número de vehículos que no acuden a la ITV ha aumentado un 27,5% en los últimos 5 años”. Además, entre los defectos más graves detectados por las ITVs se encuentran alumbrado y señalización, ruedas y suspensión y emisiones contaminantes.
Un parque móvil de los más viejos de Europa, con 14,9 años de media
Según los datos del Ministerio de Industria, Comercio y Turismo analizados por AECA-ITV, en 2022 las estaciones de ITV españolas llevaron a cabo la inspección de 21.826.484 vehículos, de los cuales el 81,4 % superó la ITV en la primera inspección.
No obstante llama la atención que el 34 % de los vehículos que debían haber pasado la ITV el año pasado según datos oficiales no acudieron. Este absentismo ha aumentado un 27,5 % desde el 2017, cuando la ratio de incumplimiento en la ITV se ubicaba en 26,6 %. Se trata de un número muy elevado frente al resto de los países europeos, lo que ACECA considera un problema “muy grave e inadmisible”.
Dejando a un lado los posibles despistes a pesar de que hay sistemas que recuerdan a los conductores la fecha de su próxima inspección (como la app Mi DGT), o que pueda haber un número determinado de vehículos sin ITV que están parados, según el director de AECA-ITV, Guillermo Magaz, el principal motivo detrás de estas cifras es más preocupante:
“El problema es que muchas de las veces los propietarios no acuden porque saben que sus vehículos tienen defectos graves y no superarán la inspección”. Asimismo, Magaz apunta a que esto se ve reflejado en “el incremento registrado en 2022 de hasta un 56 % más multas por tener la ITV caducada respecto a 2015”.
Eso no deja de ser una muestra palpable de que, “por seguridad, hay coches que no deberían estar en circulación”, apunta Magaz. Lo cierto es que no es un dato esperanzador, más teniendo en cuenta que el parque móvil está creciendo: según el Fichero Informativo de Vehículos Asegurados (FIVA) recogidos por la Asociación Empresarial del Seguro (Unespa), el pasado mes de septiembre circulaban por nuestro país 33,36 millones de vehículos.
Defectos más graves en la ITV: alumbrado, ruedas y suspensión
Los datos recogidos por AECA-ITV y el Ministerio apuntan a que, de entre los diferentes tipos de vehículos, las furgonetas y los camiones de más de 3.500 kg son los que en peor estado de circulación se encuentran. Hasta el 28,8 % ‘suspende’ la ITV a la primera.
Tras ellos se encuentran los autobuses y autocares (25,7 % ITVs desfavorables a la primera) y furgonetas y camiones ligeros (menos de 3.500 kg), con un 24,4 % de ITVs desfavorables. Por el contrario, los vehículos agrícolas son los que se encuentran en mejor estado, con un total de 85,8 % de inspecciones favorables a la primera.
Entre las causas principales por las que un 18,6% de los vehículos españoles no supera la ITV en la primera inspección están:
- Alumbrado y señalización: se trata del apartado en el que se detectan más defectos graves con un 24 %. Hemos de recordar que es uno de los sistemas de seguridad activa del vehículo, ya que ayuda a evitar los siniestros viales permitiendo mejorar la visibilidad (y que nos vean) cuando la luz es escasa o durante la noche.
- Ejes, neumáticos y suspensión: con un 21 % de defectos graves detectados es, nuevamente, el segundo capítulo en el que más defectos se detectan en la ITV. Se trata de un apartado clave para la seguridad vial, ya que los neumáticos son el único punto de contacto entre el vehículo y la carretera.
- Emisiones contaminantes: el 19 % de los rechazos en la ITV es motivado por un incorrecto funcionamiento de los sistemas de control de emisiones contaminantes, una cifra que ha aumentado tres puntos en el último año.
- Frenos: este apartado supone el 13 % de los defectos graves detectados; siendo una de las partes más importantes para la seguridad del vehículo. Una avería en los frenos impedirá detener el vehículo a tiempo o provocar un comportamiento dinámico inadecuado, aumentando las probabilidades de sufrir o generar un siniestro vial y, en consecuencia, posibles fallecidos y heridos de distinta consideración.
Tras mostrar algunos de los casos más alarmantes de defectos graves encontrados en las diferentes estaciones de ITV de nuestro país, AECA-ITV ha recordado que datos de la DGT muestran la relación que hay entre la ITV, la antigüedad del vehículo y su seguridad, que apuntan a que, “entre 2019 y 2021 aumentó un 24 % el número de turismos implicados en siniestros viales con fallecidos que tenían más de 10 años y sin ITV en vigor”.
“Tenemos que avanzar y mejorar mucho en cuanto a seguridad, pues hay una divergencia clara entre las políticas o tendencias de movilidad futura (como por ejemplo en el campo de los vehículos autónomos) y la realidad del parque móvil español”, concluye Magaz.