Hasta seis meses de espera para sacarse el carnet: la falta de examinadores en Islas Baleares se ha convertido en un verdadero problema, con estupendos cuellos de botella para poder pasar el examen práctico.
Los motivos son varios, como un incentivo insular insuficiente, bastante más bajo que el de Canarias. Pero sobre todo el precio de la vivienda, que se traduce en una diáspora de estos trabajadores de la DGT. El precio del metro cuadrado en Baleares está en máximo históricos.
Más de 8.000 alumnos esperando para hacer el práctico
Entre jubilaciones y traslados, cada año hay menos examinadores en Islas Baleares. Según publica El Confidencial hay poco más de una docena de examinadores en todo el archipiélago. Respecto al año pasado hay seis menos: cuatro por jubilación, pero otros dos se han marchado a otros destinos.
El plus de insularidad tiene que ver en esta flagrante falta de personal: es de 80 euros frente al de 400 euros en Canarias. Pero sobre todo las islas dejan de ser una buena opción debido al precio de la vivienda. Además en marzo cerró la oficina de la DGT en Ibiza, lo que desde el sector en la zona señalan como situación límite.
La falta de examinadores afecta a los aspirantes a un permiso de conducir: la media para presentarse a la prueba práctica, es de entre dos y tres meses. Pero si sumamos los suspensos ya hay casos que suponen seis meses de espera. Y es especialmente acusada en carnets como el de camión o el de autobús.
Este problema es endémico, ya en 2020 las autoescuelas en Baleares demandaban más personal ante la ingente bolsa de alumnos sin examinar. El equipo de examinadores, "más que colapsado, está desmantelado», explica a El Diario de Mallorca Joana Ribas, presidenta de la asociación de autoescuelas de las islas.
Así, según datos de Tráfico, actualmente en estas islas hay 8.114 aspirantes esperando para realizar el examen. Este número apenas ha variado en los últimos meses: en abril de 2023 había cerca de 8.186 en lista de espera. Esta situación está poniendo en riesgo a las pequeñas autoescuelas, pues hay alumnos se están negando a recibir clases prácticas hasta que puedan examinarse. Muchos optan por examinarse en la península, hartos de la lista de espera.
Las casas más caras que nunca en Baleares. La DGT admite que la falta de examinadores tiene como principal causa el precio de la vivienda en Baleares, con Ibiza en el epicentro. En el archipiélago, en marzo de este 2024, el precio medio del metro cuadrado se situó en 4.211 euros. En los últimos siete años se ha duplicado y acaba de alcanzar su máximo histórico. El valor medio de un inmueble se fija en medio millón de euros. Con tales precios, hay gente que opta por vivir en autocaravana.
El alza de los precios viene motivado por la compra de extranjeros de alto poder adquisitivo. De hecho en Baleares, el 31,5 % de las viviendas vendidas el año pasado las firmaron este tipo de clientes: este archipiélago es el que más compras registra por extranjeros.
Hacerlo tiene incentivo desde 2013: la denominada Golden Visa, que asegura la residencia a aquellos que paguen de 500.000 euros en adelante por una vivienda. Algo que desde el Gobierno quieren atajar desde ya para evitar que esta burbuja siga creciendo. En teoría el fin de esta prerrogativa se anunciará mañana en el consejo de Ministros.