Una de esas cosas que crees que no podrían pasar ha pasado en Francia: un vehículo ha amanecido con un agujero de unos 50 cm de diámetro en el techo procedente de "un objeto no identificado", y que sospechan que podría ser un meteorito.
Según relatan medios galos, los bomberos, que fueron avisados por lo vecinos ante el humo que salía del coche, rápidamente sospecharon de que podría deberse a "la caída de un cuerpo estelar" y extrajeron del vehículo una piedra de unos dos centímetros para ser analizada.
El impacto "relativamente importante", atravesó el techo, los bajos y el depósito del vehículo, ha explicado a la AFP el capitán de los bomberos, Matthieu Colobert. Lo cierto es que solo encontraron esta pequeña piedra, que difícilmente podría haber causado tal agujero en el coche.
En este sentido, los expertos creen que no se trata de un meteorito, o resto rocoso procedente de un cometa o de un asteroide. Desde el Museo de Historia Natural de París afirman que la piedra (una sola) que han encontrado no procede del espacio, y difícilmente podría haber causado esos daños en la carrocería ya que al entrar en la atmósfera su velocidad se ralentiza:
"El paso de la atmósfera marca el objeto. Y lo reconocemos por sus características. Entre estos últimos, una fina película negra en la superficie con un interior diferente, ángulos agudos o incluso caras planas", explica la especialista Brigitte Zanda a BFMTV.
Aún así, aún no saben qué pudo causar semejante agujero en el techo del vehículo: si realmente era un meteorito, debería estar en el lugar del accidente y han de encontrarlo (o eso, o alguien se lo llevó). Pero hay otras teorías.
Para François Colas, director de investigaciones del CNRS, con sede en el observatorio astronómico de París, el agujero se debería más bien a "un bloque de hielo caído desde un avión". Una hipótesis compartida por Alain Cirou, director adjunto de la revista Ciel et Espace. "Se puede formar hielo debajo de las alas, en el tren de aterrizaje, etc. y un bloque de hielo puede romperse", recoge el medio Soudest.
También ocurre "de vez en cuando, según los pilotos, que los aviones vacían los baños al acercarse a los aeropuertos. También allí se forman bloques de hielo", continúa el especialista. Aunque estos derrames no son habituales.
Sea como sea, el dueño lo va a tener complicado de cara al seguro. Algunas compañías excluyen la mayoría de daños causados por desastres naturales como terremotos, erupciones volcánicas o la caída de cuerpos siderales y aerolitos. Y tampoco es algo que cubra el Consorcio de Compensación de Seguros.
Imagen | Motorpasión generada con IA Microsoft Bing