Una de las principales pruebas de fuego para las baterías de los vehículos eléctricos son las temperaturas extremas, y si un camión eléctrico puede trabajar a diario a -20 º C, es que la ha pasado.
El archipiélago de Svalbard se sitúa en el Océano Glacial Ártico, forma la parte más septentrional de Noruega y aquí han decidido que el servicio postal opere con camiones 100 % eléctricos.
Se trata de un camión Scania de 19 toneladas que se ha puesto en funcionamiento después de haberlo probado en condiciones extremas durante un mes.
Hablamos de temperaturas máximas de 7,4 º C en el mes más cálido (julio).
Según explican los medios locales, el camión transportará paquetes, cartas y mercancías entre el aeropuerto, la terminal de correos y la oficina de correos en Longyearbyen, una ruta relativamente corta que permite que la ansiedad por la autonomía debido a la infraestructura de carga no obstaculice su cometido.
Svalbard
Longyearbyen es el asentamiento humano más septentrional del mundo con más de 1.000 habitantes.
El objetivo del servicio postal noruego -que ya cuenta con tres furgonetas eléctricas de reparto en el archipiélago- es que el 100 % de las furgonetas y el 80 por ciento de los camiones en posesión de Norway Post estén libres de combustibles fósiles para 2030.
De momento, la electricidad con la que se cargará la batería del camión provendrá de las centrales eléctricas de carbón, algo que está previsto que se elimine gradualmente a partir de 2023.
El frío es una de las principales variables que afectan a la autonomía de los vehículos eléctricos, por ello es recomendable precalentar el habitáculo en invierno. No es que la batería pierda autonomía por arte de magia, sino que en invierno acaba trabajando más (también con altas temperaturas).
No obstante, clima frío no ha impedido que Noruega siga siendo, año tras año, el país del mundo con la mayor penetración del coche eléctrico.