Era un secreto a voces y ahora es oficial, Xiaomi, el tercer mayor fabricante de smartphones del mundo se lanza en la fabricación de coches eléctricos. Para ello invertirá 10.000 millones de dólares en los próximos 10 años.
Xiaomi creará una filial expresamente para la fabricación y venta de sus coches eléctricos. En esa fase inicial, la inversión ascenderá a 10.000 millones de yuanes (1.520 millones de dólares), según informó la compañía. El director ejecutivo de Xiaomi, Lei Jun, será también el consejero delegado de la unidad de automóviles.
"Xiaomi espera ofrecer vehículos eléctricos inteligentes de calidad para que todos los habitantes del mundo puedan disfrutar de una vida inteligente en cualquier momento y en cualquier lugar", dijo la empresa en un comunicado.
La empresa tecnológica china se lanza a un espacio mercado competitivo, al menos en China. Xiaomi no solo tendrá que competir con los fabricantes de automóviles y ya conocidos del país, como Geely y BYD, sino también con startups como Nio y Xpeng Motors.
Además, las empresas de Internet también están entrando en el terreno de los vehículos eléctricos conectados. El gigante chino de las búsquedas, Baidu, lanzó en enero una empresa independiente de coches eléctricos y el mes pasado ya contrató a un CEO para ese negocio.
Apple también trabaja en un futuro coche, pero no de forma oficial, mientras que Huawei está en conversaciones con Changan Automobile, de propiedad estatal y otros fabricantes en China, como BAIC, para utilizar sus plantas y poder fabricar sus vehículos eléctricos.
Una posible alianza con Great Wall
Según Reuters, Xiaomi se aliaría con Great Wall, el fabricantes de los eléctricos de marca Ora, para la producción de su primer modelo eléctrico. Para Xiaomi, entrar en el mercado de la automoción con un coche eléctrico, tras el globo sonda que supuso el experimento con el FAW Bestune T77 vía el coche eléctrico, le permite conservar ese aspecto tecnológico propio de la marca al mismo tiempo que facilita la integración de los servicios conectados que pueda ofrecer.
Para Xiaomi, y los demás entrantes en el sector del coche eléctrico, es la promesa de nuevos usuarios y sobre todo de nuevas áreas de negocio y nuevos servicios que vender. Desde reservas en restaurantes, descuentos en puntos de recarga, servicios de streaming a bordo, publicidad en función del uso que hagamos del coche y de esos servicios asociados, entrega en el maletero del coche de productos comprados a Xiaomi o a terceros, etc.
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