Pese a que el pasado mes julio una sentencia del Tribunal Supremo determinó que poner una pegatina de la Inspección Técnica de Vehículos (ITV) a un vehículo que no la ha pasado es delito, un conductor ha sido detenido en Valladolid por cometer idéntica transgresión.
Los hechos ocurrieron la noche del pasado jueves 24 de septiembre según ha informado este lunes la Policía Nacional y que recoge la publicación El Norte de Castilla. Pero lo curioso es que los agentes le dieron el alto por otra infracción muy distinta: ir conduciendo y hablando por el teléfono móvil.
Así, este conductor se enfrenta a un delito por presunta falsedad documental, a lo que se suma una sanción por circular haciendo uso indebido del teléfono en el coche. En definitiva, le va a salir caro como le ocurrió a esta conductora que, tras ser sorprendida por tirar una colilla por la ventana, se descubrió que conducía sin puntos y sin seguro, añadiendo además que tampoco había pasado la ITV.
Más de dos años con la ITV caducada
Mientras realizaban labores de seguridad ciudadana, los agentes de la Policía Nacional descubrieron a este automovilista hablando por el móvil y conduciendo a la vez, así que le solicitaron que se detuviera. Al pedirle la documentación para aplicar la sanción, apreciaron que no llevaba colocada la pegatina de la ITV, por lo que le preguntaron si tenía en vigor la inspección técnica.
El automovilista, ni corto ni perezoso, mostró a los policías una pegatina que sacó de la carpeta de la documentación del vehículo y la colocó en la esquina superior derecha de la luna delantera de su coche. La misma tenía validez hasta junio de 2022, pero, tras hacer las comprobaciones pertinentes, los agentes descubrieron que el coche no había pasado dicha inspección.
En concreto, el automóvil no había pasado la obligada revisión técnica desde julio de 2018, es decir, tenía la ITV caducada desde hacía más de dos años. El conductor acabó detenido por la Unidad de Intervención Policial de la Policía Nacional y el coche fue trasladado al depósito municipal.
De esta manera, este automovilista deberá hacer frente a un delito de falsedad documental, pues ha colocado una pegatina que no se corresponde con su coche. Ello supone multas de seis a doce meses y penas de prisión de entre seis meses y tres años. Este verano, el conductor acusado de este mismo fraude fue condenado a pagar 720 euros.
Y a ello hay que añadirle la infracción grave que supone circular y hablar por el teléfono móvil, que acarrea 200 euros de multa y la retirada de tres puntos del carnet de conducir, y la de circular con la ITV caducada, una falta que conlleva sanciones de entre 200 y 500 euros.
Llevar la pegatina de la ITV es obligatorio
Hay que recordar que, según el Real Decreto 2822/1998, la ley exige colocar la pegatina de la Inspección Técnica de Vehículos (distintivo V-19) en el lugar indicado para ello, que es la esquina superior derecha del parabrisas o bien en un lugar visible en aquellos vehículos que carezcan de el mismo. No hacerlo se considera una infracción leve y está penado con una multa de 80 euros.
Por otro lado, circular con un vehículo dejando pasar la fecha límite de la inspección técnica se considera infracción grave o muy grave.
El primer caso se aplica a los vehículos que circulen con ella caducada o desfavorable (200 euros) y el segundo en el supuesto de que el resultado de la ITV sea negativo y siempre que las deficiencias del vehículo pudieran entrañar peligro para la seguridad vial (500 euros). Ninguna de estas dos infracciones resta puntos.
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