Cómo circular correctamente por una rotonda parece ser la eterna lección que el conductor no consigue interiorizar, aunque llevemos más de cuatro décadas utilizándolas. Y hacerlo de forma errónea o negligente puede acarrear multas de hasta 500 euros.
Para evitar sanciones y sobre todo, situaciones de peligro, la DGT recuerda qué imprudencias evitar en las glorietas. Las multas pueden ascender a los 500 euros.
Según datos de la GDT de 2020, uno de cada tres conductores implicados en siniestros viales en glorietas cometían alguna infracción, como no respetar la prioridad, no mantener la distancia de seguridad o llevar una velocidad excesiva.
La siniestralidad en este tipo de intersección fue de más de 7.000 siniestros con víctimas en 2020, con 12.332 conductores implicados y 61 fallecidos. Parece importante entender cómo evitar que estas cifras sigan subiendo.
No respetar la prioridad de paso. Entrar a una plaza circular sin respetar la prioridad que tienen los vehículos que ya circulan por dentro de la rotonda puede provocar frenadas bruscas, colisiones y alcances.
Abandonar la glorieta desde el interior: la maniobra más peligrosa. Si salimos desde un carril interior lo más probable es que nos crucemos en la trayectoria de otros vehículos, llegando a provocar vuelcos.
Esta conducta puede llegar a considerarse delito y castigarse con pena de prisión.
Circular a toda velocidad. Se trata de un tramo de vía que no está diseñado para circular a grandes velocidades: impiden cambios de carril e incorporaciones, obliga a invadir otros carriles para controlar el vehículo y multiplica el riesgo de atropello a usuarios vulnerables, como ciclistas, motoristas o peatones.
Indisciplina de carril. Cambiar de carril sin usar los intermitentes, sin respetar las prioridades u obviando la distancia de seguridad son algunas de las infracciones más habituales.