No importa cuántas veces haya que recordar cuál es la forma correcta de circular en una rotonda; nunca será suficiente. Ni salir de ella desde el carril interior, ni obviar quién tiene la prioridad entra dentro del Reglamento de Tráfico.
Y no solo la DGT recuerda con asiduidad normas tan básicas como éstas; ahora SEAT ha publicado su propia guía para circular de forma correcta dentro de una rotonda.
Lo mejor que se puede hacer: acceder con calma
Según datos de la Dirección General de Tráfico, el 75% de los conductores no sabe usar bien los carriles de las rotondas, el 68% se posicionan en carriles inadecuados, el 45% salen desde el carril del interior y el 15% trazan rectas las rotondas.
Y de acuerdo a un estudio elaborado por Axa en España, dos de cada tres usuarios no saben cómo conducir adecuadamente en una glorieta. Es a la entrada donde se concentra más de la mitad de los siniestros viales, por ello la firma de Martorell ha elaborado esta guía.
Reducir la velocidad. La primera recomendación al llegar a una rotonda es rebajar la velocidad. En el caso de circular por países como Reino Unido, Irlanda o Australia, hay que recordar que la entrada y salida es desde la izquierda.
Ceder el paso: La segunda norma de oro es ceder el paso a quienes están dentro de la glorieta. En el caso de que el conductor tenga dudas de si tiene suficiente tiempo para acceder de manera segura, los expertos recomiendan esperar hasta que la maniobra se pueda llevar a cabo sin riesgo de accidente.
Elegir el carril. En general, es recomendable circular por el exterior para cruzar menos carriles y que las maniobras sean más seguras. En cambio, si vamos a cambiar de sentido o a hacer un recorrido largo en la glorieta, es aconsejable utilizar los carriles interiores.
Claro que desde la DGT advierten de que debemos tener en cuenta la afluencia de tráfico ya que si se usa siempre el carril exterior, incluso cuando la rotonda tiene gran densidad de tráfico, fácilmente se puede entorpecer la fluidez de mismo.
Por contra, si se usa siempre el o los carriles interiores incluso sin coches en la rotonda, se está haciendo un uso incorrecto de los carriles, porque en ese caso, con poca circulación, no está justificado el uso de otros carriles que no sean el exterior, según recoge el artículo 29.1 del Reglamento General de Circulación.
Una vuelta más. En el momento de la salida, debemos colocarnos en el carril exterior, señalizando convenientemente la maniobra. El coche que circula por el exterior siempre tiene preferencia. Si en el momento de cambiar de carril, éste está ocupado por otro vehículo se debe dar la vuelta de nuevo a la rotonda hasta que esté libre y podamos salir de manera segura.
No sin el intermitente. Sólo es necesario activarlos al salir y al cambiar de carril, no al acceder a ella ni para indicar que se sigue circulando.
Un grupo de ciclistas es un solo vehículo. Cuando circulan en grupo, en cuanto el primero entra en una rotonda o sale de ella, el resto ya tiene preferencia incluso sobre los vehículos que ya circulan por la glorieta. Por lo tanto, hay que esperar hasta que pase el último.
Ante todo, mantener la calma. Está prohibido usar el claxon para mostrar enfado o recriminar maniobras de otros conductores. Sólo se puede utilizar para alertar sobre un posible accidente.
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