Los festivales son un entorno muy peculiar. Pueden pasar cosas maravillosas o tragedias. La diferencia entre unas y otras es sólo cuestión de segundos, como acaba de ocurrir en Portugal. En esta ocasión se han vuelto a juntar varios factores: concentración de gente, un entorno natural, mucho calor y (presumiblemente) alguna irresponsabilidad.
Durante la celebración del Andanças Festival, un evento que recoge la cultura y las danzas populares del país luso en el municipio de Castelo de Vide, casi tocando con la frontera española, se desató un incendio en la zona de aparcamiento donde se estacionaron los coches de los asistentes. El resultado ha sido desastroso: 422 coches totalmente calcinados.
La labor de los equipos de extinción ha sido elogiable, con al menos 160 bomberos movilizados hasta la zona, 42 vehículos de apoyo, cuatro helicópteros y un hidroavión lanzando agua sin parar para gestionar de la mejor manera posible el incendio.
Por suerte, nadie salió herido ni siquiera de levedad por lo que sólo hay que lamentar daños materiales. Unos cuantiosos daños de los que alguien tendrá que hacerse cargo. La Associação Portuguesa de Seguradoras ya está investigando lo ocurrido para determinar la causa del incendio y una vez se encuentre el foco y se localice al responsable se tomarán las medidas legales oportunas.
Vía | Hugo Teixeira