Imagina que eres un amante de los clásicos americanos afincado en California y tienes tu propia tienda donde realizas reparaciones de todo tipo, centrándote especialmente en productos Mopar, incluídos coches de carreras. Un buen día abres la tienda y descubres que han entrado a robar y te falta una de tus joyas.
Pues esto precisamente es lo que le ocurrió a Bob Mosher, residente en Arcadia, California, quien una mañana cualquiera de 2012 llegó a trabajar para llevarse un buen disgusto. El Plymouth de 1965 que llevaba tiempo devolviendo a su estado original ya no estaba. Alguien se lo había llevado durante la noche a dar una vuelta y la historia no tenía pinta de acabar con un final feliz.
El ladrón en cuestión, que no sabemos qué hizo con el coche ni durante cuánto tiempo, tuvo un enorme accidente con el Plymouth mientras lo conducía. Según el departamento de policía de la localidad, Arcadia, el vehículo se estrelló contra un árbol a nada menos que 150 millas por hora, es decir, a más de 240 km/h.
Milagrosamente, el ladrón y también conductor sobrevivió al impacto, por increíble que parezca. La verdad es que tras ver el estado en que quedó el coche, hecho un completo amasijo de hierros, parece imposible que alguien pueda salir con vida de un choque tan aparatoso como este. Podéis ver dos fotos más en el enlace a la fuente de la noticia.
Gracias a Jose por la pista
Foto | Arcadia Police Department
Vía | Hot Rod