Dejar tu precioso Aston Martin DB9 en la calle y encontrártelo sin llantas encima de un par de ladrillos tiene que ser una situación bastante desagradable.
Como dicen en el blog de donde están sacadas las fotos, ahora por ese pueblo de Australia habrá una vieja ranchera familiar con techo de plástico y unas llantas de 40.000 dólares.
Vía | autoblog.it
Más fotos | goolsbee.org