La prestigiosa consultora neoyorkina Interbrad acaba de presentar su ya tradicional ranking anual de las 100 marcas más valiosas del mundo con datos de este año. No es una sorpresa que las empresas tecnológicas lideren la tabla, pero sí que entre las diez primeras se mantengan Toyota y Mercedes-Benz (en séptimo y octavo puesto, respectivamente) tras un año nefasto para el sector de la automoción a nivel global.
De los fabricantes, Toyota alcanza ya un valor de 54.107 millones de dólares, Mercedes-Benz 50.866 millones y BMW llega a los 41.631 completando los tres primeros puestos. Sin embrago, los datos que más miradas acaparan son los de Tesla (en el puesto número 14 de la tabla general y el cuarto de la tabla de marcas de coches).
Con un valor de 36.270 millones de dólares, este año la firma de Elon Musk ha batido todos los récords y se ha coronado como la marca de mayor crecimiento del ranking, con un aumento sin precedentes del 184% en el valor de la marca y una escalada de 26 puestos en la tabla respecto al informe anterior.
Las marcas de coches más valiosas del mundo
En general, los datos del informe revelan que el sector de más rápido crecimiento, más valioso y con mejor rendimiento sigue siendo la tecnología. Las diferentes formas en las que los consumidores confían en avances como la inteligencia artificial o los servicios basados en suscripción, entre otros, lejos de mostrar signos de debilidad se refuerzan cada vez más.
Prueba de ello es que Apple, Amazon y Microsoft en conjunto representan el 62,3% del valor total de las diez principales marcas a nivel global. Y esta tendencia se refleja en otros sectores como el de la automoción, que se encuentra en pleno proceso de transformación.
Hasta ahora, la industria del automóvil tradicionalmente había sido una industria pesada con tiempos de reacción muy largos, especialmente frente a la electrónica de consumo. Si se miran en el espejo de los teléfonos móviles, las marcas de coches son como lentos dinosaurios.
En la actualidad, además del proyecto del coche eléctrico de Apple (que por el momento sigue en el aire), son ya varias las empresas tecnológicas las que se lanzan a la conquista del jugoso pedazo de pastel que ofrece para ellos la industria del automóvil, aun en un contexto de crisis de componentes.
La última en apuntarse al carro ha sido Xiaomi, que ya ha confirmado que se lanzará a la producción de su primer coche eléctrico en 2024. Y aunque no se ha colado en los primeros puestos de la clasificación de Interbrand en esta ocasión, su anuncio tuvo consecuencias económicas casi inmediatas: su cotización en Bolsa se disparó un 5,4% en apenas horas.
Para los análisis que Interbrand lleva elaborando desde 1988, parte de tres factores clave: el éxito financiero de los productos o servicios de la marca, el rol que juega cada marca en las decisiones de compra de los consumidores y la fuerza competitiva de la marca y su capacidad para fidelizar, según explica la propia entidad.
Después del parón a nivel mundial que sufrió la economía en 2020, el valor total de la clasificación se ha incrementado este año hasta los 2.667.524 millones de dólares, lo que supone un 15% respecto a 2020 y la mayor tasa de crecimiento en las últimas dos décadas para las marcas, como reflejan anteriores informes de la consultora.
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