Los fabricantes de coches y toda una serie de expertos habían vaticinado una oleada masiva de coches eléctricos chinos en Europa. El miedo a la competencia china, debido a las ingentes ayudas concedidas por China a sus fabricantes, hizo que Europa elevará notablemente los aranceles a la importación de coches chinos.
Sin embargo y de momento, los fabricantes chinos, temidos por los europeos por sus imbatibles modelos de bajo coste, no han logrado hasta ahora el éxito que esperaban en el mercado europeo del coche eléctrico. Sólo uno de cada 10 coches eléctricos vendidos en Europa es chino. No es precisamente la invasión que se temía.
Coche eléctrico chino: la anunciada invasión no se ha producido, de momento
Las marcas chinas se hicieron con el 10,3% del mercado de coches eléctricos en el primer semestre de 2024 en los 18 principales mercados europeos (incluidos Reino Unido, Noruega y Suiza), según datos de la firma alemana independiente de análisis Schmidt Automotive Research (SAR). Eso es solo un punto más que en la primera mitad de 2023.
"Es un pez grande en un estanque pequeño", resume Matthias Schmidt, analista de SAR. Los eléctricos chinos sólo representan el 3,1% de las ventas de coches nuevos en Europa, independientemente del tipo de motorización, eléctrica o gasolina.
Las marcas chinas colocaron en los seis primeros meses del año 93.100 coches eléctricos en el Viejo Continente. Es decir, vendieron uno de cada diez coches eléctricos en Europa. En comparación, el Grupo Volkswagen vendió unos 317.200 coches eléctricos en el mismo periodo y Tesla colocó 161.525 coches.
Así, la cuota de mercado de las marcas chinas es inferior a la de Volkswagen (18,4%), Tesla (16,9%) y Stellantis (11,7%). Pero al mismo tiempo están por delante de Renault y Nissan (8,1%) y Hyundai-Kia (7,5%).
Este resultado, nada desdeñable, pero lejos de ser la avalancha que muchos predecían, se debe en gran parte al éxito de MG, marca del grupo estatal SAIC. MG acaparó más del 46% de las ventas de coches eléctricos chinos en Europa y 4,7% del mercado europeo de coches eléctricos en los seis primeros meses del año vendiendo unos 43.300 coches, esencialmente de su modelo MG 4.
Geely también se apoya sobre marcas europeas para conquistar nuestro mercado, con Smart (en asociación con Mercedes, pero que controla), Volvo y Polestar para abrirse camino, y desde hace poco ha añadido su propia marca Zeekr. En los seis primeros meses del año vendió un total de 28.800 coches, sin contar Volvo, de los cuales 15.400 fueron Smart y 12.700, Polestar.
Los gigantes chinos BYD y Great Wall Motor, así como las start-ups Nio y Xpeng, son los últimos en llegar al hipercompetitivo mercado europeo, y sus inicios son todavía modestos. Así, BYD que fabrica tanto coches eléctricos como PHEV y que es capaz de vender 70.000 coches en una semana en China, ha colocado en Europa 16.100 coches eléctricos.
Sólo es un bache en el camino de las marcas chinas
Si la conquista de Europa con los coches eléctricos no es la que todos temían es también en parte porque los fabricantes han experimentado toda clase de contratiempos, empezando por la logística.
La falta de buques de transporte de automóviles, los barcos ro-ro, y la capacidad limitada de la flota existente, algunos buques no pueden acoger coches eléctricos, les ha retrasado. La solución ha sido construir más y más barcos propios (los ocho buques de BYD podrán llevar un total de 56.000 coches) para no depender de navieras occidentales.
Ahora que la logística está solucionada, se enfrentan a un estancamiento de las ventas de coches eléctricos en Europa, un segmento que no pasa del 15% del mercado. Durante el primer semestre del año, las matriculaciones apenas tuvieron un 1% de crecimiento.
No es un momento ideal para aumentar la cuota de mercado cuando se es una marca desconocida y en un segmento que parece no interesar a la mayoría del público.
Además, las marcas chinas tienen ahora en contra los aranceles impuestos por la UE a la importación de coches eléctricos chinos, que dañan notablemente su enorme margen de beneficio y aumenta la presión que tienen por utilizar sus fábricas en China, ambos aspectos dañados por una guerra de precios en su tierra natal.
Por otra parte, que las marcas chinas no vendan los coches eléctricos que esperaban, no es un problema para ellas. BYD y Chery instalan factorías en suelo europeo, mientras MG busca hacer lo mismo. Y es que el coche eléctrico chino está siendo un caballo de Troya para la industria europea.
Ahora mismo, en realidad, las marcas chinas están conquistando el mercado a marchas forzadas ofreciendo lo que la mayoría de marcas han decidido no proponer, coches asequibles.
MG se ha alzado en menos de cinco años al Top 20 de las marcas que más venden en Europa, por delante de CUPRA, Mazda o Jeep. En el primer semestre de 2024, MG vendió 126.396 coches, de los cuales 43.300 fueron coches eléctricos, es decir, sólo el 34% de sus ventas se hacen con coches eléctricos.
Omoda, una marca de Chery, sigue la misma estrategia. Ha empezado su andadura en nuestro país como un cohete. En sólo siete meses ya ha vendido casi 3.369 unidades de su Omoda 5 y Omoda 5E, la versión eléctrica. Ambos modelos se fabricarán a partir de finales de año en Barcelona, pero sólo ha matriculado 40 unidades de la versión eléctrica.
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