En un país (multicolor) en el que es posible ganar un juicio cuando te quemas tomando café*, no nos debe sorprender que una decena de fabricantes hayan recibido una demanda de 28 personas de Estados Unidos por ocultar los riesgos de intoxicación por monóxido de carbono cuando venden coches con arranque por botón, keyless o sin llave. No es la primera vez que se registra una demanda similar. Ya en 2011 conocimos una actuación parecida, en aquel caso contra Toyota.
Desde que comenzó a comercializarse en 2003, son más de cinco millones de vehículos los que cuentan con este sistema en el país americano, así que el alcance de la nueva demanda es enorme. BMW, Daimler, Fiat Chrysler, Ford, General Motors, Honda, Hyundai, Nissan, Toyota y Volkswagen son los fabricantes afectados. La razón argumentada ante el Tribunal Federal de Los Ángeles habla del momento en el que el conductor abandona el vehículo llevando consigo la llave del vehículo.
Según explican los demandantes, existe la creencia de que el motor se detiene cuando no se detecta la llave en su interior, por lo que los conductores confían en esa posibilidad y se exponen a lesiones e incluso a la muerte por inhalación de monóxido de carbono. Comoquiera que el motor del coche no se detiene por esta circunstancia, la demanda apunta a la posibilidad de que esto haya sido causa de 13 muertes en el país americano.
En su escrito, los demandantes afirman que los fabricantes podrían haber advertido a sus clientes acerca de los riesgos letales que conlleva este sistema, o incluso haber instalado un dispositivo para desconectar el motor cuando no es necesario que se mantenga en marcha. Quizá esta última petición, la de la detención del motor de forma automática, sea la única mínimamente sensata en una demanda que suena absurda. Y es que los motores térmicos que están en marcha tienden a echar humo por el escape, con su dosis de monóxido de carbono. Esto es así desde hace más de un siglo, de manera que no se puede decir que pille mucho por sorpresa. O no debería.
Vía | El Mundo. ¡Gracias a Kiko Fernández de Castro por la pista!
En Motorpasión | Arranque sin llave: El asesino silencioso que acecha en las sombras de EEUU