En plena guerra comercial desatada entre Europa y China, ahora se suma un creciente temor de las marcas de coches europeas: que su buen trato comercial con EE.UU se tambalee. El atentando contra Donald Trump el pasado fin de semana lo está catapultando a la silla presidencial y eso podría suponer mayor proteccionismo.
Esto ya se está notando en Bolsa, con la bajada de valor de algunas firmas automovilistas europeas. Pero también preocupa que EE.UU acabe imponiendo aranceles a coches importados desde Europa.
Más proteccionismo, menos libre comercio
Trump no sólo está ganando enteros en la carrera por la Casa Blanca, también ha escogido como segundo al mando a JD Vance, que sería vicepresidente en caso de que los Republicanos ganen las elecciones en noviembre. Conservador y negacionista del cambio climático, al igual que Trump se inclina por políticas más proteccionistas que impulsen el Make America Great Again.
EE.UU y Europa gozan del mejor trato comercial del planeta y eso podría cambiar si hay cambio en la presidencia. Y más si cabe si hablamos de coches eléctricos, por el que cada vez apuestan más las marcas de Europa cuando en América valoran lo contrario para salvar su industria. Es más, para ganarse el favor de las petroleras ha prometido fulminar el coche eléctrico si gana las elecciones.
"Dado que la estrategia de Trump es poner a Estados Unidos en primer lugar, es difícil imaginar que una presidencia de Trump sea buena para los mercados de activos fuera de Estados Unidos", señala por ejemplo Michael Metcalfe, director de estrategia macro de State Street, según recoge Reuters.
¿Aranceles del 20 % para los coches europeos? Uno de los mayores miedos es que EE.UU imponga aranceles a los coches importados desde Europa. Barclays pronostica que se les podría aplicar un 20 % de tasas. Lo que supondría coches europeos más caros en el mercado norteamericano, lo que nunca favorece a las ventas.
Todo en un mercado donde las europeas no son las favoritas: japonesas como Toyota, Nissan u Honda se reparten el pastel como más vendidas junto a norteamericanas. También las coreanas. No obstante para ciertas europeas, EE.UU no deja de ser un importantísimo mercado.
Esto supondría un duro revés ya que, además, China está estudiando imponer aranceles del 25 % a coches de gasolina de alta cilindrada importados desde Europa en represalia por los nuevos aranceles a los coches eléctricos. Afectaría esencialmente a marcas premium como BMW o Audi, incluso más que a otras de lujo como Porsche, Ferrari o Bentley.
Recordemos que EE.UU ha incrementado un 100 % los aranceles a los coches eléctricos chinos, pero ve a Europa como aliado contra este enemigo común. Una medida preventiva, ya que ningún coche eléctrico chino se vende en tierra estadounidense. Todo lo contrario que europeos de cero emisiones.
Caída de acciones para marcas que venden y mucho en EE.UU. Si bien los aranceles a coches europeos son una posibilidad, lo que sí se ha apreciado tras el atentado del sábado es una bajada en las acciones de varias marcas europeas. Y en consecuencia, desde el lunes se está experimentando una oleada de venta de acciones porque los inversores temen que sigan perdiendo valor.
Porsche, que es una de las marcas que más dependen de sus exportaciones, ha visto caer sus acciones un 5,7 % en los últimos días. El mercado norteamericano es el más importante de la firma de Stuttgart: en 2023 acogió el 26,9 % de sus coches vendidos, por delante de China ( 24,8 %). Más de 86.000 modelos de la marca se comercializaron en EE.UU y Canadá el año pasado.
No es la única. Las acciones de Volvo han caído 1,89 % respecto a la jornada de ayer y las de Mercedes- Benz un 0,46 %, firmando una bajada del 1,26 % en los últimos cinco días. Para la de la estrella EE.UU es su tercer mercado, por detrás de China y Europa y fue la marca extranjera que más modelos eléctricos vendió allí. También para Volvo es el tercer mercado, aunque en su caso Europa es el primero y China el segundo.
En general, el índice de capital bursátil de Europa (STOXX Europe 600) ha bajado un 1 % en los dos últimos meses mientras que el indicador norteamericano se han incrementado un 6 % en este periodo y un 3,5 % en el último mes.