En una carrera marcada por las parejas de baile y la ausencia de un Big One, Clint Bowyer se hizo con la victoria en la Good Sam Club 500 disputaba en el Talladega Superspeedway. El piloto de Richard Chilldress Racing, y que ha confirmado que se marcha a Michael Waltrip Racing, venció por primera vez esta temporada superando a su compañero Jeff Burton.
De dos en dos. Así fue toda la carrera. Los pilotos, equipos y spotters llegaban a un acuerdo para empujar y ser empujado. Algo que viene siendo así en las últimas carreras con restrictor-plate. Las casi 200 vueltas fueron un continuo cambio de líder aprovechando la ventaja aerodinámica de circular en parejas.
A pesar de que tras una decena de periodos de banderas amarillas no hubo grandes accidentes, un par de ellos si que tuvieron cierto calado. Los chasers Kyle Busch, Ryan Newman y principalmente Kevin Harvick perdieron puestos y opciones en incidentes.
Al final, tras ver la bandera verde a falta de dos vueltas, Burton y Bowyer se acoplaron a la perfección y en tan sólo unos cientos de metros pusieron tierra de por medio. Como era de esperar, gracias a la ventaja sobre sus rivales, Bowyer pudo salirse de la aspiración y birlarle la victoria a su compañero.
Brad Keselowski fue el mejor aspirante al título en meta, cuarto, mientras que Tony Stewart, que rondó siempre por las primeras posiciones, finalizó en séptimo posción. A pesar de su undécima posición, Carl Edwards es más líder y tras el descalabro de Harvick y ahora es su compañero Matt Kenseth quien le persigue en la clasificación con 14 puntos de retraso. Sin hacer ruido, Brad Keselowski es tercero en la general a 18 puntos.