El circuito de Sakhir está ubicado en mitad del desierto, y eso condiciona, y mucho, todo lo que se pueda decir sobre esta creación de Herman Tilke. A grandes rasgos, y como dato esperanzador, las carreras en Bahrein suelen ser divertidas y con numerosos adelantamientos, ya que el circuito sigue el modelo Tilke: largas rectas, fuertes frenadas, y curvas de todo tipo.
Pero volvamos al emplazamiento del circuito, para entender que una de las máximas preocupaciones de ingenieros y pilotos es la fina arena del desierto, que puede perjudicar tanto a los motores, que equipan filtros especiales para la ocasión, como a la adherencia del asfalto, que se ensucia fácilmente cuando sopla el viento, que allí es casi siempre.
Y para no abandonar el factor clima, estar en medio de la nada también ocasiona que las ráfagas de viento, además de traer consigo la ya comentada arena, ocasione serios problemas de estabilidad a los monoplazas en las fuertes frenadas.
Las temperaturas en Bahrein son elevadísimas, como en Malasia, pero al ser el calor mucho más seco, los pilotos no sienten esa sensación de agobio tan exagerada. Los neumáticos también pueden sufrir los efectos de las elevadas temperaturas, sobre todo considerando que Bridgestone ha decidido traer este año los compuestos blandos y medios, en lugar de los medios y duros de la temporada pasada.
Sin duda, el componente que más sufre en Bahrein son los frenos, ya que el circuito dispone de frenadas bestiales, sobretodo la de final de recta (se pasa de 320 km/h a 80 km/h), o las de las curvas 4 y 14, precedidas ambas de unas interesantes mini-rectas. Estas frenadas son clarísimos puntos de adelantamiento, ya que además las escapatorias de asfalto que se ven al horizonte dan un plus de confianza a los pilotos para arriesgarse. Un buen pack aerodinámico para las zonas rápidas y una buena tracción para salir de las curvas lentas también son de agradecer.
Y como siempre, voy a dar mi punto preferido de este circuito: las curvas de izquierdas 9 y 10, muy técnicas, que vienen precedidas por una complicada frenada en apoyo y que se trazan como si se tratara de una única curva. Este año, sin control de tracción, veremos unos interesantes juegos de manos en esta zona. Tampoco me desagradan en absoluto las rápidas enlazadas izquierda-derecha-izquierda que forman las curvas 5, 6 y 7.
Para terminar, indicar que es un circuito de carga aerodinámica media, quizás ligeramente inferior a las empleadas en Australia y Malasia, para intentar aprovechar al máximo las largas rectas, y una configuración de suspensiones tan dura como para aguantar las curvas rápidas, y a la vez tan blanda como para facilitar el agarre mecánico en las curvas más lentas y reviradas. La estrategia tradicional es de 2 paradas.