El TGI funciona con gas natural y es una de las opciones para tener un coche con etiqueta medioambiental ECO, además es una de las alternativas que ofrecen mayor ahorro en el consumo medio.
Empiezan a verse estos modelos en el mercado de segunda mano, pero, ¿qué hay que tener en cuenta en estos coches que usan gas natural como combustible? ¿Qué ventajas e inconvenientes hay?
Gas natural como combustible
Los coches con tecnología TGI tienen motores con tecnología bifuel que son capaces de funcionar, casi en similares condiciones, con gasolina como con Gas Natural Comprimido (GNC). El coche gastará en un primer lugar su reserva de gas y cuando este se acabe, comenzará a funcionar automáticamente con gasolina. La única diferencia en la conducción es una pequeña pérdida de potencia cuando el combustible que se está usando es el GNC.
Por poner un ejemplo, el consumo medio según marca del León TGI de 2019 es de 3,5 kilos de gas a los 100 kilómetros, funcionando solo como TGI. El GNC además de ser más barato, bajar los índices de consumo y ser mucho menos contaminante, es un combustible mucho más limpio para el coche, haciendo que aceite y filtros se degraden más tarde.
El depósito de gas suele estar ubicado en los bajos del maletero, donde normalmente está la rueda de repuesto, rueda que no suelen llevar estos coches, teniendo como alternativa el kit anti-pinchazos. Además, la capacidad del maletero es más baja que las de sus hermanos de gasolina o diésel.
Hay pocas estaciones de servicio de GNC
Esta tecnología supone un ahorro importante, pero nos encontramos el problema de que la red de gasineras no es muy amplia. Si no tenemos cerca de casa o en los trayectos que hacemos habitualmente una de estas estaciones de gas, tendremos un coche de gasolina pero con menos capacidad de depósito.
Esta red de gasineras ha ido aumentando poco a poco, aunque en los últimos tiempos ha habido un parón en su expansión. Muchas de las estaciones que estaban en proyecto o han sido canceladas o su inauguración se ha pospuesto sin fecha. Gasnam ofrece un mapa de las gasineras que hay en España y Portugal.
En viajes largos, para ahorrar en combustible, hay que estudiar previamente el itinerario forzando las paradas en la estaciones de gas, o incluso calculando los posibles desvíos que hay que hacer de la ruta para llegar a ellas.
En definitiva, estos coches suponen un gran ahorro siempre y cuando se tenga a mano una estación de gas cercana, sino, tendremos un coche con etiqueta ECO que funcionará totalmente como un gasolina, con menos maletero, sin rueda de repuesto y con el mismo consumo.
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