Desde hace meses corre el rumor de que Citroën tiene la intención de regresar al mercado estadounidense. Aprovechando el nacimiento de la división DS, los planes de expansión del fabricante francés podrían concretarse. Eso dejó ver Yves Bonnefont, CEO de DS, durante el Salón de París 2014.
En conferencia de prensa, el directivo de la nueva división de Citroën afirmó que quieren hacer de DS una marca premium global, y que no se puede ser global sin los Estados Unidos. Así, la gama DS podría competir en Norteamérica contra las divisiones de lujo de las marcas japonesas, como Acura, Infiniti o Lexus.
La decisión, sin embargo, no será tomada hasta 2017. De concretarse, la comercialización no se iniciaría hasta el año 2020, una vez que DS se encuentre mejor consolidada. También tendrá que analizarse la oferta mecánica; los yanquis prefieren motores grandes y, aunque la última ola de productos americanos —o asiáticos creados para Estados Unidos— ha reemplazado los motores V6 por bloques turboalimentados de cuatro cilindros, los europeos no suelen correr con tanta suerte en territorio de Chevrolet, Chrysler y Ford.
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