Mediante una rueda de prensa celebrada en Nueva York hace unos minutos, los gigantes del automóvil Ford Motor Company y Volkswagen AG acaban de anunciar la expansión de su alianza global, que contempla el desarrollo de vehículos autónomos y eléctricos en Europa y Estados Unidos.
A raíz de este acuerdo, Volkswagen se une a Ford con una importante inversión en Argo AI, una compañía centrada en el desarrollo de tecnología para vehículos autónomos, que ya tiene planes para el despliegue comercial de este tipo de tecnología autónoma de nivel 4, tanto para servicios de movilidad compartida urbana como de reparto de bienes.
Así pues, ambos fabricantes profundizan su alianza, que arrancó en enero con el anuncio del desarrollo conjunto de vehículos industriales ligeros, y que tiene como objetivo el lanzamiento en 2022 de modelos pick-up 100 % eléctricos de tamaño medio, además de furgonetas eléctricas.
Ford fabricará eléctricos sobre la plataforma MEB
Además, tal y como apuntaban los rumores, Ford ha confirmado que se beneficiará del uso de la plataforma MEB de Volkswagen y de diferentes componentes para el lanzamiento de futuros modelos eléctricos. El primero de ellos será un modelo de gran volumen, enfocado al mercado europeo y planeado para 2023. Un segundo modelo, también para el viejo continente, llegaría más adelante.
El plan de Ford contempla la entrega de más de 600.000 vehículos eléctricos basados en la plataforma MEB en Europa, en un periodo de seis años. Esta asociación permitirá, entre otras cosas, reducir el coste de este tipo de vehículos y, por tanto, ofrecer un precio más competitivo y asequible de cara a los clientes, además de ampliar sustancialmente la cobertura geográfica de ambos fabricantes.
Apuesta por la tecnología para vehículos autónomos
Ford y Volkswagen tendrán a partir de ahora un reparto equitativo de acciones en Argo AI, consiguiendo entre ambos una amplia mayoría. Volkswagen se ha sumado a Ford con una inversión de 1.000 millones de dólares y otros 1.600 millones mediante la aportación de su compañía AID (Autonomous Intelligent Driving), que tiene más de 200 empleados.
En total hablamos de 2.600 millones de dólares (algo más de 2.300 millones de euros), y esta transacción incluye la compra a Ford por parte de Volkswagen de acciones en Argo AI por valor de 500 millones de dólares (en los próximos tres años) y la inversión por parte de Ford de 600 millones de dólares en Argo, para alcanzar el total de 1.000 millones anunciados por la firma.
De esta forma, Argo AI se encargará de facilitar a ambos fabricantes la tecnología necesaria para sus futuros vehículos autónomos. La sede de AID en Múnich se convertirá en el cuartel general de Argo AI en Europa, si bien la sede central se mantendrá en Pittsburgh, Pensilvania. Con los 200 trabajadores de AID, Argo AI pasará a tener una plantilla total de 700 personas.
En cualquier caso, tanto Ford como Volkswagen conservarán su independencia, ya que la colaboración no contempla transacciones cruzadas, es decir, que colaborarán en diversos aspectos pero ninguna de ellas tendrá acciones de la otra compañía.