Tesla lleva 15 años haciendo caja con la venta de derechos de emisiones a otros fabricantes. Las marcas que no cumplen el objetivo de emisiones medias de CO₂ recurren a estos créditos para no pagar multas millonarias.
Desde 2009, Tesla ha recaudado más de 9.000 millones de dólares de esta forma. Aunque el resto de fabricantes cada vez tienen más coches eléctricos (a la fuerza), este negocio sigue siendo muy lucrativo para Tesla. Solo en 2023 ganó casi 1.800 millones de euros con la venta de créditos de emisiones.
Si pagas, tienes derecho a contaminar
Hecha la ley, hecha la trampa. Las normativas determinan que hay un límite de emisiones medias de CO₂ para los fabricantes de coches; si lo superan, son penalizados y deben pagar. Si su media de emisiones está por debajo del objetivo exigido, las marcas pueden vender créditos de emisiones a otras compañías para que estas últimas lleguen al objetivo a golpe de talonario.
Dicho de una forma más simple: los fabricantes de coches que más contaminan pueden comprar créditos de emisiones a los que menos contaminan. También se puede decir que compran el derecho a contaminar.
Obviamente, las firmas que cuentan con más coches eléctricos en su flota están muy por debajo del objetivo de emisiones y tienen la posibilidad de vender muchos créditos de emisiones. Las que tienen más modelos de combustión suelen pasarse del objetivo de emisiones y se ven obligadas a comprar esos créditos para no pagar mucho más dinero en concepto de multas.
Esto lleva funcionando así desde hace años. En el caso de Tesla, prácticamente desde que empezó a vender coches. Más recientemente, ya en 2019, la extinta Fiat Chrysler Automobiles (FCA) llegó un acuerdo con Tesla para que los coches de la marca de Elon Musk vendidos en Europa se contabilizasen como ventas de FCA. De esa manera, FCA logró reducir su media de emisiones de CO₂.
Antes de eso, FCA ya había pagado miles de millones de euros a Tesla por la compra de los derechos de emisiones y Stellantis ha seguido haciéndolo después. En esa época, Tesla no era el gran fabricante en el que se ha convertido ahora y una buena parte de sus ingresos provenían de la venta de esos créditos de emisiones.
Ha pasado mucho tiempo desde entonces y ahora Tesla gana mucho dinero con la venta de sus coches, de hecho, el Tesla Model Y ha sido el coche más vendido en el mundo en el año 2023. Pero la firma estadounidense no se ha olvidado de su otro negocio y sigue ganando una millonada con la venta de derechos de emisiones.
Según señala Automotive News, Tesla ganó 1.790 millones de dólares el año pasado vendiendo créditos de emisiones. El mismo medio afirma que la marca americana ha recaudado casi 9.000 millones de dólares con este negocio desde 2009.
A corto plazo, todo apunta a que Tesla seguirá ganando mucho dinero de esta forma a lo largo de los próximos años. Cada vez hay más coches eléctricos en el mercado, pero el único fabricante que consigue venderlos realmente bien es Tesla; otros incluso están rebajando sus objetivos de electrificación y como los objetivos de emisiones cada vez son más duros, se ven obligados a comprar estos créditos para no pagar multas mucho más costosas.
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