Van a cenar a un restaurante y al salir su Tesla no se pone en marcha. Después de “pelearse” con la asistencia para llevarlo al servicio oficial de la marca en su ciudad, Edimburgo, los dueños de este Tesla Model Y se enfrentan a una reparación carísima.
Según Tesla, la batería de su coche se averió por culpa de la lluvia y les pide más de 20.000 euros por repararla. La marca dice que no tiene la culpa de que llueva y los clientes señalan que su coche debería poder conducirse cuando llueve sin ningún tipo de problema.
La culpa es de la lluvia. En una ciudad en la que llueve casi todo el año
Hace casi diez años ya hablábamos de que arreglar o sustituir una batería de un coche eléctrico puede salir muy caro. El tiempo pasa y, a pesar de que el precio de las baterías de los coches eléctricos está bajando, repararlas o cambiarlas sigue siendo prohibitivo. Tanto que las aseguradoras están cortando por lo sano.
Lo vimos hace unos meses con un Hyundai NEXO de hidrógeno y ahora con el caso de un Tesla que reporta el medio Edinburgh Live. Al terminar de cenar un sábado, los dueños de un Tesla Model Y quisieron coger su coche para volver a casa, pero no hubo manera. Y ahí comenzó su pesadilla.
Según señalan, tuvieron que llamar al servicio de asistencia en carretera de Tesla sobre las 22:00 horas. Tras varias llamadas, consiguieron que su coche acabase en el servicio oficial de Tesla Edimburgo alrededor de la 1 de la madrugada.
La siguiente noticia que tuvieron de su Tesla fue a través de una llamada de Tesla varios días después. La marca americana les dijo que la batería de su coche estaba dañada por la entrada de agua y que esta avería no estaba cubierta por la garantía de 8 años que ofrece Tesla para este componente.
Para sorpresa de John Bacigalupo y Rob Hussey, los propietarios de este Tesla, el taller les comunicó que el precio de la reparación ascendía a 17.374 libras, el equivalente al cambio actual a 20.088 euros.
“Honestamente, no puedo creer que esto haya sucedido. Cuando recibí la llamada por primera vez pensé que recibiríamos una factura de 500 o 1000. Cuando dijeron más de 17 mil libras, pensé que es absolutamente obsceno. Honestamente, mi corazón dio un vuelco”, declaró John a Edinburgh Live.
Los dueños del Tesla aseguran que presionaron a Tesla para aclarar si ellos tenían la culpa de la avería, pero los responsables de la marca les dijeron que se trataba de un problema climático causado por las fuertes lluvias que hubo en Edimburgo cuando el coche se averió.
“Después de hablar con un gerente, me dijo que la batería tenía agua porque el clima en Escocia había sido muy malo. Ese era el problema. Dijeron que no es necesariamente culpa mía, pero que no es responsabilidad de Tesla pagar la garantía. El gerente también me recordó que había una advertencia meteorológica amarilla en algunas partes de Escocia”, señaló John.
El dueño del Tesla también dijo que “si hubiera sabido que el servicio al cliente sería tan malo, no estoy seguro de que me hubiera molestado en comprar el coche. ¿Saben que estamos en Escocia? Ese clima no era anormal para vivir aquí”.
Según apunta Edinburg Live después de ponerse en contacto con Tesla, la marca se compromete a realizar una investigación de la queja. Mientras tanto, los propietarios del Model Y averiado aseguran que “hasta la fecha, ha sido un servicio desastroso y el estrés y la preocupación que esto genera son insoportables”.
Lo cierto es que la batería de un coche eléctrico puede dar muchos dolores de cabeza si se avería. Y por dolores de cabeza hay que entender enormes facturas en el taller. Aunque es un componente cubierto por una garantía específica del fabricante, cuando esta garantía no cubre la reparación y las marcas se lavan las manos, suele ser muy caro el arreglo.
Y eso cuando se puede arreglar porque, en algunos casos, es imposible reparar una batería, como sucede con las nuevas baterías de Tesla, a pesar de que Europa quiere imponer por ley el reciclaje.
En los casos en los que sí hay posibilidad de arreglo, la reparación puede tener un precio astronómico, o directamente “obsceno”, como señalan los dueños escoceses de este Tesla.
Y no es la primera vez que Tesla pide una cifra similar por una reparación de estas características, aunque un taller independiente pueda rebajar en varios miles de euros el arreglo.