Gracias a que Elon Musk lo compartiese en su propio perfil de la red social X, antes Twitter, con millones de seguidores, la policía del condado de Fairfax (Virginia, EEUU) descubrió hace unos días un vídeo en el que se podía ver perfectamente a dos conductores haciendo una ‘drag race’ ilegal o carrera de aceleración en plena vía pública: uno con un Lamborghini Aventador descapotable y el otro con una Tesla Cybertruck.
Aparentemente salía vencedor el conductor de la pick-up eléctrica, algo que el siempre polémico Elon Musk tuvo a bien elogiar. Ahora ambos conductores temerarios están detenidos y las autoridades ya buscan a un “tercer implicado” en una actuación tan peligrosa como irresponsable.
Medio minuto de fama puede conllevar un año de cárcel
El vídeo de la ‘drag race’ ilegal entre una Tesla Cybertruck y un Lamborghini Aventador S Roadster 60 Aniversario, publicado originalmente en X por el usuario Mario Nawfal, tiene actualmente más de 146,7 millones de visitas, después de que Musk lo compartiese en su perfil, con el mensaje la “Cybertruck puede batir a un Porsche 911 remolcándolo”.
Esta frase, alude claramente al famoso vídeo de la carrera de aceleración entre la Cybertruck y el Porsche 911 con el que se presentó la pick-up en 2023 tras años de retrasos e incontables promesas incumplidas: una carrera con poco sentido que buscaba el alto impacto, muy “al estilo Tesla”, aunque hubiese una clara desigualdad entre participantes.
Esta sorprendente carrera ilegal a plena luz del día entre la Tesla Cybertruck y el Lamborghini Aventador descapotable parece previamente preparada, en un cruce bastante transitado, con el cámara en un buen sitio (en el vídeo se ven hasta las matrículas), un ‘banderizo’ que da la salida y peatones y otros viandantes visiblemente contrariados.
Gracias a que Elon Musk aprovechó el vídeo para elogiar a su Cybertruck y publicitarla una vez más, ante su más de 200 millones de seguidores, las autoridades del condado de Fairfax, en Virginia, acabaron dando con los irresponsables conductores. La policía de este condado, que lleva años luchando contra carreras ilegales, sólo tardó unos días en localizar, detener y acusar a ambos conductores.
Además de usar el vídeo de la “drag race viral” para utilizar a estos conductores como ejemplo de lo que no se puede hacer, la policía del condado de Fairfax publicó en sus redes sociales un vídeo titulado: «Coches rápidos + falta de sentido común = multas y cargos», en el que se ve cómo cada uno de estos dos conductores eran detenidos.
En la sección de comentarios, la cuenta de la policía pedía ayuda “para encontrar a la persona que, de pie en medio de la calle, hizo señas a los pilotos para que arrancasen”. Por el momento, aún no se ha localizado ni multado ‘al banderizo’. En Fairfax, una multa por carreras callejeras ilegales está clasificada como "un delito menor de clase 1".
Dependiendo de la gravedad y de si alguien resultó herido o no durante la carrera, el tribunal puede imponer un año entre rejas a cada conductor y una multa de 2.500 dólares (unos 2.350 euros al cambio). El condado también puede revocar la licencia de conducir por un máximo de dos años, e incluso incautar y confiscar el vehículo.