La DGT apenas multa por mirar el móvil o no ponerse el cinturón. La mayoría de las multas tienen un único motivo

El pasado 2021 la DGT impuso un total de 4,79 millones de multas de tráfico: ha sido el segundo año con más sanciones de los últimos siete años. Y las más recurrentes, de largo, han sido los excesos de velocidad, que representaron casi un 64 % de las sanciones.

Esto las convierte en las más rentables, por lo que no extraña que la DGT, o el Gobierno en último término, siga invirtiendo en dispositivos de control de velocidad: entre este año y el que viene se colocarán 26 radares fijos más, siendo 16 de tramo, ya estando aprobado su presupuesto (14 millones de euros). 

Y esto se traduce en que próximamente habrá más de 900 dispositivos fijos solo contando los de la DGT, pues a esos ya que hay que sumar los de los ayuntamientos o los de Cataluña y País Vasco, que tienen transferidas las competencias de tráfico.

Las 10 multas que más pone la DGT

De las 4,79 millones de multas interpuestas en 2021 por la DGT, un 63,7 % fueron por exceso de velocidad, sumando un total de 3,05 millones de sanciones entre radares fijos y móviles.

El segundo puesto es para las infracciones por circular sin la ITV pasada o vigente o negativa, pero la brecha ya es considerable: las denuncias se cifraron en 591.077, representando un 12,3 %.

Y el tercer cajón del podio fue para los conductores que circularon sin tener el carnet de conducir o bien estando invalidado o caducado, con un total de 126.751 multas, suponiendo un 2,6 %.

El cuarto puesto es para los conductores detectados sin hacer uso del cinturón, casi 106.000 sanciones suponiendo un 2,2 %, y para la utilización indebida del móvil, con mas de 101.400 multas siendo un 2,1 % del total.

Hay que recordar que en cuanto al uso del móvil, ahora se sanciona con la resta de seis puntos si se utiliza sujetándolo con la mano mientras se conduce. La multa se mantiene en 200 euros.

Más multas de velocidad, con los radares fijos a la cabeza

Si analizamos los datos de los últimos cinco años, 2021 ha sido el único en el que se ha rebasado la frontera de los 3 millones de multas de velocidad, superando los 2,94 millones de 2019 que fue el último año antes de la pandemia.

No obstante en 2015 la cifra fue aún mayor, pues las sanciones por exceder la velocidad se cifraron en 3,28 millones. Sea como fuere desde 2018 siempre han ido en aumento.

Más de un 70 % de multas, para los radares fijos. Los cinemómetros que más sancionan a los conductores son los fijos, entre los que se incluyen los de tramo: aglutinaron 2,19 millones de multas en 2021 de los 3,05 millones totales de esta infracción. Esto supone un 71,7 % de las sanciones aplicadas por exceder el límite de velocidad.

Por su parte, los radares móviles detectaron casi 864.000 infracciones de velocidad, lo que se traduce en un 28,2 %. Si bien los radares fijos siempre han puesto más multas, desde 2017 los cinemómetros fijos han ido abriendo brecha, quedándose los móviles por debajo del millón de sanciones.

Dónde están colocados son los radares fijos. Los cinemómetros de control de velocidad fijos pueden ser de cabina o estar ubicados en postes (en el margen de la vía) o bien colocarse en pórticos.

Pero además a estos se suman los radares de tramo, que miden la velocidad media en un tramo. Para ello se colocan una o varias cámaras infrarrojas en los extremos del tramo.

La DGT dispone actualmente de 780 radares fijos y 92 radares de tramo, a los que se sumarán muy pronto otros 10 fijos (que irán rotando en 20 cabinas) y 16 de tramo. Tendremos por tanto un total de 790 fijos y 108 de tramo en los próximos meses.

¿Y los radares móviles? Pueden instalarse en vehículos (normalmente coches) que pueden ser camuflados o no, o bien en trípodes.

Pero también están los pequeños y discretos Veloláser, que la DGT utiliza desde hace cuatro años. Presumen de ser más indetectables, pues además de en trípodes, pueden adherirse por ejemplo a biondas de protección.

Asimismo son inalámbricos, de tal manera que los agentes pueden controlarlos a distancia, lo que permite que no se sepa el punto exacto dónde se está controlando la velocidad.

A día de hoy, cerca de 600 puntos son susceptibles de estar controlados por radares móviles. Hay que recordar que, a diferencia de los fijos, no se obliga a señalizar su ubicación.

Multas y velocidad

Las sanciones por exceso de velocidad siempre son exponenciales en tanto en cuanto se rebasa el límite: pueden ir de los 100 euros sin detracción de puntos, a los 600 euros con la resta de seis puntos del carnet. La DGT suele señalar que son las de menor cuantía las que más se interponen.

Otras multas: detectores de radar. Este año, con la nueva Ley de Tráfico, la DGT ha elevado las sanciones para los detectores de radar, que son dispositivos capaces de detectar un control móvil que no está señalizado.

Ahora se sanciona no solo usarlo, si no meramente llevarlo instalado en el coche. La multa es de 200 euros y además supone la resta de tres puntos del carnet.

Los únicos dispositivos legales son los avisadores de radar, que anuncian los radares fijos cuya información es pública y además siempre van señalizados.

¿Justifica la siniestralidad cada vez más controles de velocidad?

Según los datos de los últimos tres años, (aún no se han publicado los completos de 2021) la velocidad excesiva e inadecuada ha sido la segunda causa de accidentes mortales, siendo solo superada por las distracciones.

Y ha ido en aumento: en 2020 se cifró en un 25 % (257 fallecidos por esta causa), en 2019 en un 23 % y en 2018 en un 22 %. No obstante, en estos dos últimos años, si bien el porcentaje fue menor las muertes fueron superiores: 298 y 301 fallecidos para 2019 y 2018 respectivamente.

Pero hay que tener en cuenta que la DGT incluye en esta estadística tanto los excesos de velocidad como una velocidad inadecuada.

Y la inadecuada no siempre se detecta por un radar, ya que puede depender de las condiciones de la vía o de la climatología, indicándose en algunos casos en paneles variables: por ejemplo, si llueve o hay niebla. Los radares siempre están calibrados para multar por tipo de coche, vía o tramo, pero no son variables.

Por otro lado, pese a que las distracciones llevan más de cuatro años a la cabeza como principal causa de las muertes en carretera, las sanciones por usar indebidamente el móvil solo representa un 2 % de las multas. La mencionamos porque se trata de la distracción más recurrente.

Bien es cierto que es más complicado de detectar, pero en los últimos años la DGT ha aumentado la vigilancia de esta infracción gracias a las furgonetas camufladas, los drones y las cámaras de control de cinturón que han sido adaptadas para controlar esta falta. A ello se suman además los helicópteros Pegasus.

Sea como fuere, en 2022 apunta a que habrá aún más multas por exceso de velocidad. No en vano, la supresión del margen de 20 km/h para adelantar en carreteras convencionales previsiblemente se notará.

Además, la DGT ya ha adelantado que precisamente en este tipo de vías se favorecerá la implantación de radares de tramo por esta media. Es decir que los 16 nuevos anunciados tienen amplias papeletas para colocarse en estas carreteras.