Seguramente el titular os sonará, pero esta vez no es por los bombines defectuosos, los palieres del Cruze o el riesgo de incendio de unos SUV/pick-up. Solo en Estados Unidos se van a revisar 1,34 millones de coches por un posible defecto en la dirección asistida.
El fabricante avisa que diversos Chevrolet, Saturn y Pontiac pueden quedarse sin dirección asistida, pasando a ser resistida, tras un aviso en el panel. Se pueden seguir conduciendo, pero con mayor esfuerzo en el volante y el consiguiente riesgo de colisión.
Los más veteranos sabrán lo que es conducir sin dirección asistida, pero no es lo mismo. Los giros entre topes son más amplios en una dirección resistida de serie, por no hablar del peso que llevan en el eje delantero los coches modernos. Se van a revisar los siguientes modelos:
- Chevrolet Malibu: 2004, 2005, 2006, 2008 y 2009
- Chevrolet Malibu Maxx: 2004, 2005, 2006
- Chevrolet HHR (atmosféricos): 2009, 2010
- Chevrolet Cobalt: 2010
- Saturn Aura: 2008, 2009
- Saturn ION: 2004, 2005, 2006, 2007
- Pontiac G6: 2005, 2006, 2008, 2009
Además se revisarán todos los que sufrieron una llamada a revisión previa en la que se inspeccionó la dirección. En el caso del HHR se le junta a la llamada a revisión de los bombines, y hay unos pocos miles afectados en Europa. Todos esos coches son de fabricación norteamericana.
Como podéis apreciar, se siguen haciendo responsables de los coches de marcas extintas como Saturn y Pontiac, como corresponde por ley. Si se detecta un potencial fallo de seguridad, los fabricantes están obligados a contactar con la NHTSA y hacer una llamada a revisión preventiva sin coste para los clientes.
Se comprobará en cada caso si hay que reemplazar el motor de la dirección asistida, la columna de la dirección, la unidad de control o combinación de varios elementos. Quien pagó por dicha reparación en el pasado recibirá una compensación económica.
Adicionalmente, 309.160 HHR y 96.324 ION que no están afectados por esta llamada a revisión recibirán una garantía de por vida en su dirección asistida. Hay preocupación por el efecto en cuestión de imagen y calidad que puede suponer tanta llamada a revisión en tan poco tiempo.
General Motors no ha informado de accidentes ni heridos a consecuencia de este problema. Todas estas campañas de seguridad van a costar a la compañía cientos de millones de dólares. Es el producto de los errores de gestión de la anterior GM, la que fue rescatada y salvada por el Gobierno de Estados Unidos.