Llega un nuevo e interesante oponente que pretende plantar cara al dominio alemán de Audi, BMW y Mercedes (con el permiso del Lexus RC) en el segmento de las berlinas coupés. Se llama Infiniti Q60 y por su llamativo diseño no pasará desapercibido.
El Infiniti Q60 es el producto final que ha derivado de aquel precioso prototipo presentado en el Salón de Detroit de hace dos años, el cual adelantaba las líneas de un nuevo coupé de diseño elegante y deportivo. Hemos conducido el Infiniti Q60 que se pone hoy mismo a la venta en los concesionarios españoles y te contamos con todo detalle qué ofrece y qué nos ha parecido en esta primera toma de contacto.
Antes de entrar en detalle en el Q60, hablemos de la marca que hay detrás. La salud de Infiniti es muy buena. En todo el mundo la marca de lujo de Nissan, ha crecido un 7%, en Europa un 140% y en España más que en Europa, un 149%. Es una marca que poco a poco, con buena letra y nuevos productos, va consiguiendo hacerse con un trozo del pastel de vehículos Premium bastante interesante.
Si en 2015 Infiniti vendió en España 496 coches, el año pasado casi triplicaron esa cifra con los 1.236 coches vendidos, fruto claro está, de la llegada del Q30 y QX30.
La carrera de Infiniti es imparable en España, donde pretenden llegar a los 1.750 unidades. Eso sí, el coche que hoy nos ocupa, no marcará la diferencia ya que no es un modelo de volumen, sino de imagen. Su objetivo es vender en 2017 unas 100 unidades del Infiniti Q60. Y esto es lo que ofrece para conseguirlo.
Digno sustituto del G37
El Infiniti Q60 llega como nuevo integrante de una familia de coupés que tiene gran tradición en la marca japonesa, especialmente en el mercado norteamericano, donde gozaban de gran éxito. Hablamos de los G35 y G37, lanzados en 2002 y 2008, respectivamente en ese mercado.
Así pues el Q60 es el sustituto natural del G37, del cual se llegaron a vender algunas unidades en nuestro mercado. Por suerte, el lenguaje de diseño de la marca japonesa ha evolucionado mucho de la mano de Alfonso Albaisa, el diseñador de origen cubano que ahora se encarga de marcar las formas de los nuevos diseños y de paso, pasear su nuevo coche por las calles de La Habana (Cuba).
El Infiniti Q60 llama la atención lo veas por donde lo veas. Aparcadas en la puerta del hotel donde Infiniti España nos había citado para presentarnos su nuevo modelo, la gente se paraba a su alrededor para fotografiar y saborear su estilizado diseño.
Muy marcado por las líneas curvas, especialmente en la parrilla delantera de doble arco, que junto con unas ópticas muy afiladas, dota de personalidad a un frontal que no deja indiferente. Las luces delanteras son LED, como es habitual en este segmento.
En la vista lateral, el diseño del Q60 destaca por una línea de cintura muy alta que obliga a que las ventanillas sean muy bajas y con líneas afiladas, especialmente en las traseras que en los montantes C tienen forma de media luna. ¿Queda claro que no hay muchas diferencias respecto al Concept?
Las llantas de aleación de aluminio de 19 pulgadas son parte de la dotación de serie. El tercer volumen del maletero queda muy integrado con la línea descendente del techo, que baja de forma fluida y constante dando al conjunto un aspecto ancho, bajo y robusto sobre el asfalto.
En definitiva, se trata de un conjunto de 4,69 metros de largo, elegante y deportivo a partes iguales que, aparcado en la acera o rodando entre el tráfico urbano, es capaz de atraer muchas miradas.
Un interior muy bien acabado
Como es normal en una marca de lujo como Infiniti, en el interior nos encontramos con un habitáculo diseñado para cuatro ocupantes en el que el cuidado por los materiales y la calidad de acabados es su principal seña de identidad.
Los plásticos del salpicadero, los ajustes de las molduras o el tacto de los diferentes mandos que se disponen por el interior no tienen demasiado que envidiar a los de los modelos equivalentes de Mercedes o BMW, aunque me atrevo a decir que en calidad percibida, un Audi A5 Coupé como el que probamos hace unas semanas podría estar un poco por encima de este.
El diseño del salpicadero es muy acogedor, gracias a una consola central elevada en la que destacan las dos pantallas táctiles desde las que puedes manejar con relativa facilidad todos los sistemas del vehículo para adaptarlo a tus gustos o necesidades.
El acceso a las plazas posteriores se facilita moviendo mediante un botón automático y tras un movimiento algo lento, los asientos delanteros hacia adelante. Las plazas posteriores son bastante amplias, especialmente en espacio para las piernas, pero penalizan un poco en altura libre al techo/luneta debido al diseño de este y al de la luneta posterior, lo cual impide llevar a personas de talla grande.
Detrás de ellos, el maletero de 342 litros se puede quedar algo corto si lo comparamos con el de un Audi A5 Coupé (465 litros) o el de un BMW Serie 4 Coupé (445 litros), pero no se queda precisamente lejos del tamaño de maletero de un Mercedes C Coupé (380 litros).
Dos motorizaciones y dos niveles de acabado
El Infiniti Q60 llega a España con dos motorizaciones. La de acceso es un motor de gasolina de 2.0 litros turboalimentado que entrega 211 caballos de potencia a 5.500 RPM y 350 Nm de par entre 1.250 y 3.500 RPM.
Ese motor se combina con la caja de cambios automática de 7 velocidades, siempre con tracción trasera y destaca por unas prestaciones aceptables para un coche de su nivel, como demuestra el 0 a 100 km/h en 7,3 segundos o la velocidad punta de 235 km/h.
Los consumos por su parte se ciñen a unas cifras que no parecen descabelladas para un coche de su categoría. En ciudad homologa 9,2l/100km, en carretera 5,4l/100km y en ciclo combinado 6,8l/100km.
El otro motor que está disponible es el nuevo V6 biturbo de 3.0 litros que ya convierte al Q60 en una máquina de altas prestaciones gracias a sus 405 CV a 6400 RPM y al par máximo de 475 Nm que entrega de forma constante entre 1600 y 5200 RPM.
Este motor también se combina con la caja de cambios automática de siete velocidades, aunque en su caso siempre va ligado a la tracción integral, que tiene un reparto de par inteligente que en condiciones normales envía el 70% de la potencia al eje trasero, pudiendo variar ese porcentaje en función de las necesidades del momento.
Con este motor de 405 caballos, el Infinti Q60 acelera de 0 a 100 km/h en 5 segundos y alcanza 250 km/h de velocidad punta, todo ello a cambio de unos consumos algo más elevados: 13,3 l/100 km en ciudad, 7,1 l/100km en carretera y un mixto de 9,4 l/100km.
Tal vez lo más sorprendente de todo, es que en Infiniti España estiman que de las 100 unidades que estiman vender de este modelo este año, un 50% corresponderá a la versión de 211 caballos y el otro 50% al de 405 caballos.
Al volante del 2.0t
Infiniti nos había preparado una ruta de dos horas como primera toma de contacto con el coche, saliendo del centro de Madrid por la autovía A1 hacia algunas carreteras conocidas de la sierra. Así podríamos probarlo en todo tipo de condiciones: urbano, autovía y carretera nacional.
Lo primero que me gustó del Q60 es la posición de conducción, ya que permite situar muy baja la banqueta, como debe ser en un coche de corte deportivo. Encontrar la posición perfecta al volante es posible gracias a una columna de dirección con regulación eléctrica.
Salimos por el siempre congestionado tráfico de Madrid y en ese ambiente lo más destacado tal vez sea el magnífico aislamiento acústico del habitáculo, que hace que te sientas al margen de cualquier ruido externo o de rodadura.
Más tarde nos confirmaron en Infiniti que ese era uno de los aspectos en los que más habían trabajado en este modelo, de ahí que incorpore el Active Noise Cancellation, un sistema que anula las frecuencias negativas de los ruidos del motor. Tanto es el empeño que han puesto en aislar el habitáculo de los ruidos externos de rodadura, que hasta las llantas de 19 pulgadas se han diseñado de tal forma que los radios amortiguan las vibraciones.
El motor 2.0t de 211 caballos en combinación con la caja de cambios es suficiente para moverse por ciudad a ritmos dignos y cuenta con unos bajos bastante buenos que ayudan en las aceleraciones desde parado o a la hora de recuperar ritmo.
Salimos pronto a carretera, y al mismo tiempo que el silencio se adueña del habitáculo, el confort de marcha empieza a hacer que el camino sea más placentero del que esperaba en un coche deportivo y coupé como este. Tras una buena serie de kilómetros confirmé que, como parece habitual en este segmento, el Q60 tiene un tacto de rodadura más cercano al de una berlina de su tamaño que la de un coche deportivo.
Las suspensiones absorben perfectamente los baches, amortiguan las ondulaciones de la carretera y eso, unido a un motor que no incita a exprimirlo y al silencio que inunda el habitáculo, hacen que este coche sea más un GT que un deportivo como los de antaño en su tamaño.
Una vez abandonada la autovía, confirmamos las sospechas. Incluso en el modo Sport de los cinco disponibles, el Infiniti Q60 se percibe como un coche poco apropiado para llevar a cabo una conducción muy deportiva en carretera de curvas. Puedes disfrutar de su magnífico aplomo, pero no intentes ir más allá de lo que irías en una berlina del mismo tamaño.
Se siente pesado en las curvas, la carrocería tiende a inclinar cuando entras en apoyo y es que los 1.749 kilos de la versión con acabado Sport se hacen notar cuando intentas llevas las cosas al límite.
Aun así, detalles como la dirección electrónica, que tiene un tacto fantástico y transmite más de lo que podía esperar, ayudan a que no sea una tarea frustrante hacer de vez en cuando un tramo de curvas disfrutando de la conducción de este coupé de elegante figura.
También ayuda en esta tarea la caja de cambios automática de siete velocidades, la cual si bien no tiene levas en el volante, sí que está en contacto con el sistema de navegación del coche y es capaz de modificar los parámetros de cambio en función de la orografía del terreno.
Si el coche detecta que te estás acercando a una pendiente, que llevas el cambio en modo Sport y estás haciendo un tipo de conducción deportiva, decidirá darte la posibilidad de estirar esa marcha en la que estás o de bajar una marcha para que tengas la respuesta que necesitas en cada momento.
No hemos podido probar la versión 3.0t de 405 caballos, ya que durante la presentación solo estaban disponibles unidades con el motor básico, pero si tenemos en cuenta que apenas hay cambios estructurarles o de puesta a punto entre uno y otro más allá del paso de tracción trasera a tracción total, no creo que en este sentido el motor grande vaya a suponer un gran cambio de carácter. Sí, será más rápido pero no más deportivo, y eso tiene su punto positivo.
Así pues, en el Infiniti Q60 nos encontramos con un nuevo modelo del segmento coupé que se adapta a las tendencias de su género, cuyos integrantes se han convertido en modelos elegantes, de diseño deportivo, rápidos y confortables, válidos por tanto como alternativa a las berlinas medias. Ahora hay una quinta opción para elegir, un coche muy completo y con más personalidad, bajo mi punto de vista, que cualquier otro rival.
Precios en España del Infiniti Q60
Modelo y versión | Precio |
---|---|
Infiniti Q60 2.0 Premium | 48.400 euros |
Infiniti Q60 2.0 Sport | 50.800 euros |
Infiniti Q60 3.0 Sport AWD | 66.700 euros |
Estos son los precios del Infiniti Q60 para España, pero es interesante tener en cuenta que durante la fase de lanzamiento del nuevo modelo hasta el 31 de marzo, está disponible un 2.0 por 43.990 euros acogiéndose a la financiación del Santander Consumer EFC.