Hoy el Papa Francisco ha recibido en el Vaticano de mano de Stefano Domenicali, CEO de Lamborghini, su nuevo superdeportivo. Se trata de un Lamborghini Huracán LP 580-2, la versión de tracción trasera del superdeportivo de Sant’Agata Bolognese.
Siendo para quien es, tenía que ser una unidad muy especial, y el resultado lo corrobora. Seguramente no encontraremos jamás un Huracán igual a este en manos de un particular, ya que este luce en la carrocería los colores de la bandera del Vaticano, con el blanco y amarillo como tonos predominantes.
La estilizada carrocería del superdeportivo luce el color blanco, y está recorrida de delante a atrás con dos líneas amarillas que evocan la bandera vaticana.
A subasta y el dinero a obras benéficas
Pero su Santidad el Papa Francisco no derrapará demasiado por las adoquinadas calles del Vaticano y Roma, ya que han decidido que el coche se subaste y el dinero recaudado se destine a la caridad.
Tres serán los proyectos a los que irá destinado el dinero: recuperación de la comunidad Cristiana en Irak, ayuda a mujeres que han sido víctimas de abusos y de tráfico de personas y por último ayuda a niños y mujeres necesitados en África.
La subasta tendrá lucar el 12 de mayo de 2018 por RM Sotheby’s y teniendo en cuenta que el precio de un Lamborghini Huracán LP 580-2le que se duplique ese precio.