En la producción del coche eléctrico, el nervio de la guerra está en las baterías. España es el cuarto productor europeo de automóviles y si quiere mantener su posición necesita fábricas de baterías, las conocidas como gigafactorías. Y la primera gigafactoría de España estará en Extremadura y abrirá sus puertas en 2023.
No se trata de la fábrica anunciada hace unas semanas y cuya financiación viene de los fondos europeos de rescata postpandemia. El grupo Volkswagen quiere fabricar baterías en España y Ford también, al disponer de la factoría de Almussafes. Sin embargo, si todo va como previsto, la primera gigafactoría de España y del sur de Europa será la de Extremedura.
La ministra de Industria, Comercio y Turismo, Reyes Maroto, confirmó la noticia. La ministra señaló que se trata de un proyecto privado "en el que se ha estado trabajando desde hace dos años y está encabezado por una empresa española”, Phi4Tech, con sede en Toledo.
El proyecto de Phi4Tech va más allá de la simple factoría de baterías para coches eléctricos, incluirá la construcción de dos fábricas en las provincias de Cáceres y Badajoz, así como la puesta en servicio de las minas de litio de Cañaveral y níquel de Monesterio.
El SG de Industria y Pyme, Raül Blanco, ha asistido temáticamente a la presentación del proyecto de Phi4tech de la primera fábrica de baterias en España.
— SECRETARÍA GENERAL DE INDUSTRIA y PYME (@IndustriaGob) March 24, 2021
🗣"Es una buena noticia para la industria en España: Extremadura como centro industrial y tecnologico" pic.twitter.com/EfzZNY1B3T
El proyecto supone más de 1.000 millones de euros en inversión, de los cuales 600 millones ya están asegurados e irán a la construcción y puesta en marcha de las dos fábricas. Los promotores del proyecto calculan que darán trabajo directo a 1.300 personas una vez estén en marcha.
Una de los dos fábricas será de celdas de baterías y estará ubicada en la Plataforma Logística de Badajoz, al mismo tiempo que la segunda fábrica producirá cátodos en una ubicación aún por determinar, pero en la provincia de Cáceres. Ambas factorías se abastecerán del litio de la mina de Cañaveral y del níquel de la mina de níquel de Monesterio, que volverá a entrar en funcionamiento tras su compra.
Hasta 10 GWh de capacidad
La construcción de la primera fábrica comenzará a finales de 2021 o principios de 2022. Sus promotores prevén una capacidad productiva de 10 GWh repartidos en cinco módulos productivos de 2 GWh cada uno y que se pondrán en servicio de forma paulatina. El primero podría estar funcionando ya en 2023, con una inversión de 80 millones de euros, y se prevé que alcancen los 6 GWh en 2024.
La segunda fábrica, la de cátodos, va ligada a la producción de las minas de litio y níquel de la zona, la de litio de Las Navas en Cañaveral (Cáceres), cuya explotación corre a cargo de Lithum Iberia, y la de Aguablanca en Monesterio (Badajoz), una vez que se haya reabierto. Ya que en octubre de 2020 recibió la declaración de impacto ambiental positiva.
En todo caso, ninguno de estos proyectos está vinculado con la polémica y posible mina de litio de San José Valdeflórez, en la Sierra de la Mosca de Cáceres. Ahí se encontraría el segundo yacimiento de litio más grande de Europa y que podría abastecer la fabricación de 10 millones de coches eléctricos.
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