En la primera jornada de Madrid Central, que comenzaba el pasado viernes 30 de noviembre, Metro de Madrid no puso en funcionamiento un 20% de los trenes que deberían haber estado operativos en una de las franjas de hora punta. Así lo ha reconocido la propia empresa según publica El Diario.es. El déficit de conductores es la causa señalada por los sindicatos.
El viernes pasado, en las franjas de mayor afluencia de viajeros, deberían haber estado funcionando todos los trenes de los que dispone Metro y que ascienden a 269. Sin embargo, entre las 13:15 y las 17:00, 63 de los mismos se quedaron en cocheras, a pesar de que la Comunidad de Madrid había programado incrementar el flujo de trenes, tanto por la llegada de Madrid Central como por el inicio de la época navideña.
Metro ha confirmado que, efectivamente, entre esas horas funcionaron menos metros de los planificados, aunque señala la falta de conductores como causa, lo que han ratificado los sindicatos. Asimismo, reconocen que no es la primera vez que incumplen las tablas del Consorcio de Transportes de Madrid: entre el 4 y el 23 de noviembre circularon un 17% de trenes menos de los previstos.
Menos trenes en plena hora punta
En concreto, a partir de las 13:15 comenzaron a reducirse trenes: a las 14:00 la bajada de efectivos se fijaba en un 23% (sólo operaron 206), mientras que a las 17:00 no lo hacía el 15%, estando operativos 229 trenes de los casi 270 disponibles.
El momento de mayor carencia de trenes coincidió precisamente con una de las franjas con mayor afluencia de viajeros, justo cuando un número notable de trabajadores finalizaba su jornada laboral. A ello se suma el inicio de Madrid Central: según ha confirmado el Ayuntamiento, el número de viajeros del transporte público, tanto de Metro como de EMT, se incrementó en comparación a otros días.
Sin embargo, Metro señala a El Diario.es que la tabla de trenes se cumplió al 91%, ya que el hecho de que falten trenes a horas determinadas no significa que no operen durante el resto del día. Cabe por tanto preguntarse por qué fue precisamente en hora punta cuando empezó a reducirse el servicio.
A pesar del refuerzo programado, esto se tradujo en que, durante el viernes 30, el número de trenes en activo fuera el mismo que el del viernes 23 de noviembre. En otras palabras, el refuerzo no se hizo efectivo.
Déficit de conductores
Los sindicatos señalan la carencia de maquinistas como principal causa de esta reducción en los trenes. La plantilla de conductores pasó de 2.000 a 1.765 tras el ERE aplicado por la empresa en 2014 y, desde entonces, sufre un evidente déficit que supone una reducción en la afluencia de trenes. Una carencia que ha sido puesta de manifiesto en los últimos cuatro años tanto por los propios trabajadores de Metro de Madrid, como por los usuarios.
Metro ha intentado solucionar el problema ofreciendo promociones internas en trabajadores de otras aéreas de la empresa de transporte, pero sólo ha conseguido que 20 de los mismos pasen a ser conductores. Por otro lado, ha puesto a disposición de los maquinistas horas extras remuneradas para reforzar las fechas navideñas, así como la entrada de Madrid Central, pero únicamente un 1% de la plantilla ha respondido al llamamiento.
Según UGT, el añadido de conductores necesarios para cumplir correctamente con el servicio debería estar entorno a los 120. Metro de Madrid ha confirmado a El Diario.es que su intención es ofertar públicamente 100 nuevos puestos a partir de enero de 2019, aunque previamente deberán examinarse y formarse, lo que alargaría el proceso hasta casi el verano.
Por otro lado, el número de trenes también se ha visto reducido por la polémica del amianto: de los 320 efectivos de los que disponía Metro, 50 han tenido que ser retirado por contener este compuesto.