El grupo PSA y FCA (Fiat Chrysler Automobiles) están a un paso de poder completar su fusión. La comisión antimonopolio de la Unión Europea podría dar su visto bueno en pocos días. Se podría así completar la fusión de los dos grupos (por valor de 38.000 millones de dólares) y que daría lugar al cuarto fabricante mundial de automóviles.
Tras los comentarios de rivales y clientes, los fabricantes de automóviles solo tuvieron que modificar la redacción de sus concesiones a los reguladores antimonopolio de la UE, sin cambios en la sustancia, aseguran en Automotive News.
Para disipar las preocupaciones de la Unión Europea de que la empresa resultante de la fusión del grupo PSA y FCA tuviese una posición dominante en las ventas de vehículos industriales ligeros en Europa, el grupo PSA ha ofrecido aumentar la capacidad de producción del Toyota ProAce.
No habría posición dominante en el mercado de las furgonetas
Este modelo se fabrica en Francia en la factoría Sevelnord del grupo francés y comparte plataforma con los Peugeot Expert y Citroën Jumpy.
Además, los dos grupos permitirán que sus concesionarios puedan reparar y encargarse del mantenimiento de marcas rivales, pero solo en algunas ciudades. Y es que por muy extraño que parezca, en ocasiones, un concesionario de una marca no puede ocuparse del vehículo de una marca rival si quiere seguir teniendo dicha concesión.
La aprobación de la Comisión Europea formalizaría así la creación de Stellantis, el grupo resultante de la unión del grupo PSA y de FCA. La fusión total anunciada a finales del año pasado uniría a marcas como Fiat, Jeep, Dodge, Ram y Maserati con Peugeot, Citroën, DS y Opel. El objetivo inicial es conseguir ahorrar unos costes anuales de 5.000 millones de euros, todo sin cerrar fábricas, han asegurado los dirigentes del grupo PSA.
El grupo PSA y FCA esperan completar la fusión en el primer trimestre de 2021.
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