El culebrón ‘Takatagate’ está dando para escribir un libro, y es que, hasta donde alcanza mi memoria, no recuerdo un problema de tal magnitud referente a un proveedor de automóviles. Recordarás que Takata, una empresa japonesa que es el segundo fabricante mundial de airbags y el primero de cinturones de seguridad, se vio implicada hará dos años por proveer airbags defectuosos a un total de unos 24 millones de automóviles, que afectaron a marcas como BMW, Chrysler, Ford, Honda, Infiniti, Mazda, Mitsubishi, Nissan, Pontiac, Subaru y Toyota.
Pues bien, ante tal escándalo y para evitar que una incidencia de esta magnitud se vuelva a producir en un futuro, el Ministro japonés de Transporte, Akihiro Ohta, ha anunciado que está considerando seriamente la posibilidad de revisar las leyes existentes para, de esta forma, establecer unos procedimientos de supervisión a los proveedores de automóviles mucho más exigentes. En marzo conoceremos más detalles en este sentido.
En estos momentos, el Ministerio de Transporte japonés está revisando y evaluando con su equipo de trabajo todos los informes facilitados por los fabricantes afectados, salvo Takata, que, al parecer, no está proporcionando la suficiente información para que todo este proceso avance con mayor rapidez. Según afirma Ohta, las reuniones en dicho ministerio son diarias. Por tanto, es de esperar que, en breve, tengamos nuevas noticias sobre Takata y sus airbag defectuosos.
En Motorpasión | Caso 'Takatagate'