El nuevo coche de Fernando Alonso en la Fórmula 1 podría ser total o parcialmente rosa. El equipo Alpine ha llegado a un acuerdo de patrocinio con la empresa BWT, una compañía austriaca especializada en el tratamiento de aguas que tiene una larga trayectoria como sponsor en el motorsport.
Los rumores que unían a Alpine con BWT vienen de lejos, pero finalmente se han confirmado cuando quedan muy pocos días para la presentación del nuevo monoplaza de Fernando Alonso, el que debería confirmar si el plan ha sido algo más que un meme alargado. El 21 de febrero saldremos de dudas sobre los nuevos colores de Alpine.
El 21 de febrero sabremos como de rosa es el nuevo Alpine
La entrada de BWT supone la presencia de un tercer gran patrocinador en la estructura de Alpine, uniéndose a los sponsors de Mapfre y Castrol. Sin duda, un apoyo importante para el equipo, y veremos si viene de la mano de Otmar Szafnauer, el jefe de equipo rumano que estuvo en Aston Martin hasta hace unos meses.
Precisamente de Aston Martin viene el patrocinio de BWT. La marca de tratamiento de agua es uno de los sponsors más generosos, y por lo tanto más codiciados, de la Fórmula 1. El gran problema es que exigen pintar el monoplaza de su color rosa característico, algo que cualquier marca no se puede permitir.
BWT pintó de rosa durante varios años los coches primero de Force India y después de Racing Point, pero cuando el equipo pasó a ser el oficial de Aston Martin vinieron los problemas. Lawrence Stroll quiso dotar al coche del verde característico de la marca británica, mientras que el rosa de BWT apenas quedó como detalles esporádicos.
Tras solo un año, BWT ha cortado esa experiencia para buscar un nuevo equipo, pero sorprende que hayan llegado a un acuerdo con uno, Alpine, que a priori tampoco debería ser de los que cambien a la ligera sus colores. Renault ha hecho una clara apuesta por darle más visibilidad a Alpine en el automovilismo, y su azul, rojo y blanco no deberían ser negociables.
Veremos si finalmente ha habido un acuerdo intermedio para que solo parte del Alpine sea rosa, quizá la zona que tradicionalmente es roja. Lo que parece evidente es que la decoración clásica de la marca deportiva gala se va a ver alterada a cambio de un muy buen precio, aunque aún no han trascendido cifras.
Lo que está claro es que BWT, igual que el año pasado, tenía muchas más opciones en la parrilla para haber pintado un coche de rosa. Probablemente un equipo como Williams, con quien se rumoreó que hubo negociaciones, no hubiese puesto trabas. Pero la apuesta es Alpine, quizá en busca también de resultados deportivos.
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