Las 24 Horas de Le Mans es sin duda la prueba automovilística de resistencia más prestigiosa y de las que más pasiones levantan en el mundo. Nació como una carrera diferente, pues a diferencia de las pruebas de velocidad, buscaba premiar la fiabilidad y eficiencia de los coches.
Ford ha sido durante años uno de los competidores más destacados en Le Mans y, por ello, vamos a analizar la apuesta que ha hecho la marca en los últimos años y que les ha permitido reencontrarse con el podio de la carrera de resistencia por excelencia
Ford GT40, el mito que cambió Le Mans para siempre
Si hay un Ford que ha hecho historia en Le Mans, sin duda ha sido el GT40. Con victorias entre 1966 y 1969 (incluido un triplete el primer año), la marca del óvalo azul dominó la prueba de grandes turismos durante un lustro.
El GT40 tiene su origen en la rivalidad entre Henry Ford II (nieto del fundador) y Enzo Ferrari a principios de los 60. El norteamericano quiso fabricar un coche que derrotara al italiano donde más le dolía —Le Mans— y para ello reunió a un auténtico dream team de ingenieros y diseñadores de la época.
El GT40 nació de la rivalidad entre Henry Ford II y Enzo Ferrari
El resultado fue el Ford GT40, bautizado así por las 40 pulgadas de altura que marcaban las reglas de Le Mans, y diseñado y construido íntegramente en Reino Unido con un motor americano de Ford V-8 de 4,7 litros, que posteriormente sería ampliado hasta los 4,9 litros.
Sin embargo, la primera generación Mk I se enfrentó a ciertas dificultades en las pruebas de los años 1964 y 1965, viéndose forzada a abandonar en ambas ocasiones.
No sería hasta 1966, con la llegada al equipo de Carroll Shelby y la introducción de su chasis en el Mk II, cuando Ford conseguiría la primera victoria para un fabricante americano. Y no sólo eso, sino que acapararía el podio completo con los australianos Bruce McLaren y Chris Amon en lo más alto.
A ésta le seguirían victorias en 1967 con el GT40 Mk IV, ya construido en EE. UU., y en 1968 y 1969 con el antiguo Mk I reconvertido. Se rompía así no sólo la racha triunfal de Ferrari sino que marcaba el fin de la era de victorias de coches de carretera.
Ford GT en el siglo XXI
Desde entonces, varias unidades de las cinco generaciones que salieron a la luz del GT40 han seguido compitiendo en diversas carreras de resistencia. Ya en el año 2015, la compañía norteamericana anunció su vuelta a Le Mans en 2016, coincidiendo con el 50º aniversario de la primera victoria de aquel mítico GT40. Esta vez lo haría con un modelo denominado solamente como Ford GT, diseñado por Ford Performance desde cero y simultáneamente tanto para la competición como para el mercado.
El Ford GT posee un motor de 3,5 litros biturbo EcoBoost con 655 CV
Este nuevo Ford GT destaca por la omnipresente fibra de carbono en carrocería, chasis, paneles, llantas… que reducen el peso del vehículo a la mínima expresión. Por su parte, la estudiadísima aerodinámica de su diseño se ve apoyada por soluciones de aerodinámica activa como el alerón móvil o la reducción de altura para mejorar las prestaciones según las características del circuito.
Y para impulsarlo todo, un motor de 3,5 litros biturbo con tecnología EcoBoost de Ford y 655 CV de potencia que pasa, eso sí, de la tradicional disposición V8 a V6 por exigencias del campeonato.
La vuelta de Ford al podio de Le Mans
Con semejante obra de ingeniería, Ford se puso en manos del veterano equipo de carreras de Chip Ganassi, para tratar de llevarse la victoria en las 24 Horas de Le Mans 2016 en la categoría de GTE-Pro, la heredera de la competición original. Para reforzar el 50ª aniversario, los cuatro Ford GT presentes en la carrera competirían con los dorsales #66, #67, #68 y #69, los cuatro años que marcaron la etapa dorada de Ford en Le Mans.
Ford consiguió la victoria 50 años después de su primer triunfo en 1966
Con tal cantidad de numerología y simbolismo invocando a la diosa Victoria, el triunfo era inevitable y los pilotos Joey Hand, Dirk Muller y Sebastien Bourdais llevaron a su Ford GT #68 a lo más alto del podio, por delante precisamente de Ferrari. El Ford GT #69 ocuparía el tercer puesto.
Este 2017, el equipo de Ford y Chip Ganassi Racing ha logrado una valiosísima segunda posición tan sólo por detrás de Aston Martin, en una carrera que se recuerda como una de las más disputadas de los últimos años y en la que sufrieron multitud de contratiempos. Los otros tres Ford GT consiguieron acabar la carrera y entre los diez primeros clasificados, lo que habla de la fiabilidad de la ingeniería de Ford Performance.
Esta fiabilidad del Ford GT, junto con el excelente trabajo en pista de Chip Ganassi y la competitividad mostrada por el equipo a lo largo de todo el campeonato de resistencia, dan esperanzas a los seguidores de Ford de ver una nueva etapa dorada del óvalo azul al frente de Le Mans.
Imágenes | Wikimedia/GregGibson | Wikimedia/LotharSpurzem | Ford GT | Ford Performance
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