Si te digo Opel Frontera, enseguida vendrá a tu cabeza la imagen de un todoterreno de los años 90 con un diseño inconfundible. Bueno, pues cambia el chip porque hay un Opel Frontera y no tiene nada que ver con ese todoterreno que todavía puedes encontrarte a diario en cualquier pueblo.
¿Te suena la historia del Ford Puma? Opel ha hecho algo parecido y ha cogido un nombre mítico para dar vida a un nuevo SUV urbano que sustituirá al Opel Crossland y estará disponible con mecánicas micro híbridas y en versión 100% eléctrica.
El Opel Frontera tiene entre ceja y ceja al MG ZS
Seguramente, la imaginación de la gente que pone nombres a los coches no se ha acabado y todo es una cuestión de marketing, pero ha vuelto pasar: una marca ha cogido un nombre histórico y se lo ha puesto a un nuevo modelo que no tiene nada que ver con el original.
Se trata de Opel, que acaba de presentar el nuevo Opel Frontera. En su día, la marca del rayó utilizó este nombre en un todoterreno que llegó a España a mediados de 1992 y acabó siendo muy popular. Como, además, salió muy duro, se siguen viendo unidades a patadas en cualquier pueblo de nuestro país, tanto del tres puertas como del cinco puertas.
Pues bien, ahora que los todoterrenos viven una nueva época dorada, tendría todo el sentido del mundo que el Opel Frontera regresase y lo ha hecho, pero lo único que tiene en común con el primer Opel Frontera es el nombre. Es un caso parecido al del Ford Puma.
Ahora, el Opel Frontera es un SUV urbano que llega para sustituir al Opel Crossland. Comparte la plataforma Smart Car de Stellantis con su primo francés, el Citroën ë-C3, y con el próximo Citroën C3 Aircross, pero todavía no conocemos sus dimensiones, aunque Opel asegura que será un coche muy amplio por dentro y con un maletero de 460 litros que podrá ampliarse a más de 1.600 litros abatiendo los asientos traseros.
De momento, las imágenes que ha publicado la marca alemana del interior de su nuevo todocamino urbano dejan claro que el Frontera apuesta por el mismo diseño que los últimos lanzamientos de Opel.
Está completamente digitalizado con dos pantallas de 10” unidas bajo el mismo marco y es muy minimalista, pero cuenta con botones físicos para las funciones clave, incluidos los del climatizador. Por lo demás, no hay grandes novedades, salvo el detalle de diseño de la consola central con la silueta del coche, similar al del tiburón que tiene el Corsa en esta zona.
Tampoco hay detalles de la gama de motores, pero Opel asegura que estará disponible con motores micro híbridos con red eléctrica de 48 voltios, por lo que es de esperar que utilice el 1.2 gasolina de 100 CV y 136 CV que ya utilizan otros coches de Stellantis, como el Opel Corsa o el Jeep Avenger, pero no hay nada confirmado.
El Opel Frontera también tendrá una versión eléctrica. En este caso, lo lógico es pensar que compartirá motor y batería con el Citroën ë-C3, por lo que esta versión podría tener 113 CV y una batería de 44 kWh que le permita ofrecer más de 300 km de autonomía.
Esta variante debería tener un precio muy ajustado porque Opel quiere posicionar este Frontera como un coche asequible con un precio inferior al Opel Mokka, el otro SUV urbano de la compañía alemana.