Volkswagen ha dado comienzo a la era Diess de golpe. El nuevo consejero delegado del Grupo Volkswagen, Herbert Diess, ha sustituído a Matthias Müller en un cambio estratégico que pretende acelerar el desarrollo de coches eléctricos, tranquilizar a los accionistas y terminar de limpiar una imagen manchada por los peores de los escándalos.
Ahora todos los rumores apuntan a que Diess también sustituirá a Müller como presidente del consejo de supervisión de Audi el mes que viene
Cambios para enterrar el pasado
En declaraciones recogidas por Autonews, un portavoz de Audi ha reconocido que "el consejo de supervisión tomará una decisión sobre la presidencia en su próxima reunión".
La firma de los cuatro aros debe centrarse en una estrategia que le permita superar a sus rivales premium BMW y Mercedes-Benz, y no puede permitirse el lujo de esperar a que Müller se retire en 2020. Mientras tanto, Diess contará muy pronto con una mano derecha que asumirá, en el cargo de director de Operaciones, la responsabilidad de gran parte del negocio.
Así las cosas, el panorama es el siguiente: Diess controlará el I +D de todas las marcas; Oliver Blume, presidente de Porsche, se encargará de la producción y Rupert Stadler, presidente de Audi, será el vicepresidente de ventas del grupo.
El grupo industrial quiere reorganizar así sus actividades y ya ha anunciado que las agrupará en seis áreas de negocio y una séptima dedicada en exclusiva a China, su principal mercado. Con un presupuesto de 34.000 millones para I + D, en el Grupo Volkswagen no quieren cerrarse a ninguna colaboración.
De momento, la división de camiones Volkswagen Truck & Bus ha firmado una colaboración con el fabricante japonés de camiones y autobuses Hino Motors (filial de Toyota Motor) para crear, como no podía ser de otra forma, sistemas de conducción autónoma y vehículos eléctricos.
Respecto a esta filial, el grupo alemán prepara su salida a bolsa a partir del año que viene.
También se están planteando vender algunas participaciones que no forman parte del negocio principal, como Ducati. Hace ocho meses, el jefe de Estrategia, Thomas Sedran, declaró que Volkswagen no necesitaba vender nada para obtener solvencia.
Con este cambio de era, Volkswagen quiere dejar atrás un Dieselgate que ha cambiado a la industria y ha propiciado nuevos estándares medioambientales. Mientras se desgranan los detalles de cada nuevo plan, se va olvidando poco a poco aquellos experimentos con animales y personas que deberían marcar un antes y un después para cualquier empresa, pero que no lo hará.