Hace meses que corren rumores de una alianza entre dos gigantes: Ford y Volkswagen. El plan del consorcio alemán estaría centrado en desarrollar y producir vehículos industriales ligeros en una planta de Ford en Turquía e incluso se habló de que Volkswagen podría estar dispuesto a compartir su plataforma MEB con la firma del óvalo.
Finalmente, en la última reunión del consejo de supervisión de Volkswagen se ha determinado que "las asociaciones son un factor clave de éxito para dar forma al futuro" y se confirma una sinergia para la fabricación de una gama de vehículos comerciales ligeros junto a Ford, descartando a todas luces una fusión.
Identificadas más áreas de cooperación con Ford, que seguirá siendo un competidor
El Grupo Volkswagen sigue trabajando para financiar un futuro bastante ambicioso: plantar cara a Tesla con coches eléctricos a la altura los productos de Elon Musk pero a la mitad de precio y pasar de ser el mayor fabricante europeo de vehículos con motores de combustión a producir de forma masiva vehículos eléctricos.
Pero para ello ha de poder financiar, a ser posible con sus propios recursos, una producción en masa de los productos que forman parte de su familia I.D. así como seguir creciendo en el competitivo mercado de las baterías de iones de litio y de tecnología autónoma.
Así, la marca de Wolsfburg ha confirmado que "las conversaciones con Ford sobre una cooperación industrial anunciada anteriormente están progresando positivamente hasta el momento" y que además "las dos compañías se complementan muy bien en términos de productos y regiones. El desarrollo conjunto y la fabricación de una gama de vehículos comerciales ligeros es el núcleo de la cooperación prevista".
El CEO del Grupo, Herbert Diess, espera tener un esquema desarrollado del acuerdo de colaboración a final de año, con el que espera importantes efectos de esta alianza que les permitan desarrollar una próxima generación de camionetas Amarok y otros vehículos SUV.
El objetivo de esta colaboración es conseguir reducir costos o aumentar el rendimiento a través de la escalabilidad, pero nunca a través de una fusión o la compra de acciones: "No obstante, Ford y Volkswagen seguirán siendo competidores, ya que la cooperación propuesta no se relaciona de ninguna manera con las estrategias comerciales", ha comunicado la firma.
Pero además de esa cooperación con el fabricante estadounidense en el segmento de vehículos comerciales ligeros, se prevé ampliar la alianza en "campos adicionales" que han encontrado.
Durante los próximos cinco años hasta finales de 2023, la compañía gastará 44.000 millones de euros en el desarrollo de la movilidad eléctrica, la conducción autónoma, nuevos servicios de movilidad y la digitalización en sus vehículos y en sus plantas. Esto son 10.000 millones más en comparación con la ronda de planificación del año pasado.
Además, se ha anunciado que en las plantas de Alemania en Zwickau, Emden y Hannover se fabricarán vehículos eléctricos de la familia I.D., proporcionando garantías laborales a los trabajadores hasta 2028. Mientras que en Emdem se ensamblarán coches pequeños y sedán de diferentes marcas del grupo, Hannover se especializará en la producción de la esperada furgoneta I.D. Buzz.
Sin embargo, la crisis del diésel aún afectará las salidas de efectivo durante 2019 y 2020 y, a pesar del enfoque continuo en la electrificación y los servicios de movilidad futuros, la marca ha confirmado que los motores de combustión interna "seguirán siendo importantes" durante varios años: "Ofreceremos motores diésel con niveles reducidos de NOx y carbono", ha dicho el presidente del comité de empresa, Bernd Osterloh.
