Seguramente has oido alguna vez el término drift en tu vida, pero hay una acepción utilizada en Oriente que posiblemente no conoces. Los japoneses lo llaman dorifuto (no pueden pronunciar algunas letras occidentales) y es el arte de tomar las curvas al límite de la adherencia con una pérdida limitada de control, mucho más deprisa de lo normal.
Pero vayamos por parte, por que este tema da para escribir un libro. Si no sabes qué significa Anime o Manga, haré una brevísima introducción. Manga significa cómic, pero en la cultura de Japón no se restringe sólo a niños y adolescentes, hay mangas para todos los colectivos sociales, desde niños pequeños hasta ejecutivos obsesos sexuales.
Anime son las transformaciones de los mangas a series de televisión de dibujos animados (o series de dibujos sin manga previo) y en aquel país, este negocio mueve mucho más dinero que el cine normal con actores de carne y hueso. Poco a poco, Japón ha ido exportando su cultura mediante los fans y después por las empresas. Seguro que alguno le suena Akira, Bola de Dragón, Sherlock Holmes, Oliver y Benji, Caballeros del Zodiaco, etc.
Puede que conozcas algunas series, pero hay otros centenares que no conoces o no conocerás jamás por que no han salido (y quizás nunca salgan) del mercado original, y ni siquiera se traduzcan.
Ahí sólo queda aprender japonés o esperar, y el japonés oído es mucho más fácil que el escrito. Mediante el fansub, traducción desinteresada por fans, los occidentales han ido conociendo este mundo y se lo han ido contagiando a otros, haciendo la secta más grande, y este post pretende atraer nuevos yonkis entusiastas.
Hay animes sobre muchísimos temas, pero el que ahora nos ocupa es “Initial D”, un anime de culto sobre el mundo de las competiciones ilegales japonesas de dorifuto de mediados de los años 90. Está basado en el manga de mismo nombre, escrito por Shuichi Shigeno.
La historia se desarrolla en una zona real de Japón con algunos nombres cambiados, con carreteras de montaña que normalmente están totalmente desiertas de noche (cuestión de cultura). En la localidad de Akina, unos pilotos callejeros, los “Akina SpeedStars” reciben un reto de una banda rival, los “Akagi RedSuns” para echar una carrera. Los primeros no tienen suficiente nivel para enfrentarse a los otros, asi que piden ayuda a un vendedor de tofu que en su juventud fue un maestro en la disciplina del drift.
En el centro del argumento tenemos a Takumi Fujiwara, el hijo del piloto, que con 18 años se acaba de sacar el carnet y parece no tener ni puta idea experiencia con coches. Su amigo de toda la vida, Itsuki, busca comprarse con Takumi el coche de sus sueños, un Toyota AE86, para unirse a los Akina SpeedStars y participar en carreras callejeras. Están supervisados por Iketani, un chico mayor que lidera este clan de corredores. Los tres trabajan en una gasolinera cuyo propietario es amigo del padre de Takumi.
De personajes secundarios tenemos a Bunta Fujiwara, el padre de Takumi, Mogi, la chica por la que todos babean, Kenji, un corredor de los Akina SpeedStars que mancha los gallumbos cuando se acerca un reto serio, los hermanos Takahashi... Es mejor verlo, y seguramente después de ver el primer episodio te entren ganas de más. Cuando uno pierde la virginidad con el anime sin licenciar se ve un poco incómodo con los subtítulos, pero para todo tiene que haber una primera vez.
No cuento más para no reventar la serie, pero la historia sigue avanzando y van apareciendo nuevos oponentes con mejores coches, más detalles sobre la vida de los personajes (muy lejos del nivel de Perdidos), más técnica, etc.
Ahora un poco de tecnoverborrea: esta serie tiene como protagonistas mecánicos a los iconos de la potencia japonesa: Toyota Corolla, Nissan 180SX y Skyline, Mazda RX-7, Mitsubishi Lancer… Deportivos muy conocidos en Japón y EEUU, delirio de los tuneros, con motor delantero y tracción trasera, es decir, FR (Front Engine, Rear Drive), ideales para las competiciones de drift por su capacidad de sobreviraje.
No veremos american muscles (lo siendo SandMan) ni nada que venga de Europa. El detalle de llamar a los coches por su nombre de chasis (AE86, FD3S, R32, GTR) es una frikada a la que hay que acostumbrarse. Estaría interesante una temporada contra músculos de Detroit y similares o deportivos europeos como los Audi quattro, BMW, Ferrari, Lamborghini, etc.
El coche más importante es el Toyota Corolla (nombre de chasis AE86), también llamado Sprinter Trueno. En resumen era un 2-3 puertas con un motor 1.6 de inyección electrónica atmosférico que daba unos 110 CV en adelante, pesaba poco y tenía tracción trasera. En el anime esto se comenta mucho, que cómo un coche tan viejo (del 83) puede plantar cara a los RX-7 preparados, R32 y demás torpedos japoneses en clara superioridad técnica, al menos eso se supone.
Por cierto, para quien no esté puesto en motores: los AE86 montaban 4 cilindros en línea, el Mazda RX-7 motor rotativo Wankel (de ahí ese sonido tan especial y muchas RPM), el R32 4 cilindros o V6 6 cilindros en línea atmosféricos y turbo, los Subarus motores bóxer (como los Porsche), etc. Y por supuesto, nada de calamares turbodiesel, Initial D huele a gasolina de muchos octanos.
La serie está plagada de detalles para entusiastas, como minilecciones de mecánica, técnicas avanzadas como el punta-tacón, doble embrague, contravolante, derrapes de inercia, subviraje… sonido hiper-realista (es para orgasmizarse morirse cómo suena uno de los RX-7 de los RedSuns, y sé de buena tinta que es sonido real)... no en vano han sido asesorados por el Dios del drift en carne y hueso, Keiichi Tsuchiya, además sale algún recorte de su “Drift Bible” en episodios sueltos.
Hay algunas cosas que un entendido ve que no tienen mucho sentido, como algunas reducciones que hacen en las que no coincide la lectura del tacómetro con el sonido de los motores, algunos derrapes por CG no están bien animados o cosas así. Pero ya es ser muy puntilloso. La serie se puede disfrutar aunque no tengas ni idea de coches, pues los traductores colocan notitas para entender lo fundamental.
Según avanza la serie, se van tocando aspectos más técnicos, como turbocompresores, kits de inyección, ajuste de suspensiones, terminología avanzada… Es una serie con un potencial freak demasiado elevado, y el que avisa no es traidor. Las escenas de carreras están básicamente hechas con CG (animación por ordenador), que a nivel técnico pueden mejorar un poco, aunque es una serie antigua. El estilo de dibujo de los personajes es muy particular y al principio lo odias, pero te vas acostumbrando.
Son episodios de 24 minutos, repartidos a lo largo de varias temporadas, OVAS e incluso una película de imagen real filmada en Hong Kong, que hace un crimen de guerra con el argumento pero entretiene, y ya la han doblado a castellano. Ni se te ocurra verla antes que la serie, se llama “Initial D, the Movie”.
La serie me temo que hay que verla subtitulada por que no ha sido licenciada en nuestro país. Os dejo 3 clips de Youtube del primer episodio, pero con subtítulos en inglés, no los he encontrado en castellano. Es fácil obtener la serie con determinado programa alusivo a animal de tareas para el campo, buscando por ejemplo como ”[AU-EMA-F] Initial D”, y la primera que hay que buscar es la “1st Stage” o “First Stage”. Si luego te enganchas y quieres más, tienes serie para rato, de hecho el año que viene saldrá otra temporada más.
Hay juegos para consola y ordenador, y en el Need For Speed (a modo de ejemplo) puedes practicar esta disciplina en las modalidades “Drift” a partir del Underground I, preferiblemente con un volante para poder hacerlo como Dios Keiichi Tsuchiya manda. Los derrapes más espectaculares son los de cuatro ruedas a la vez, lo que en esta serie se toman muy en serio.
No sólo de coches vive Initial D, pues hay un poco de humor, un toque de romance, mucha intriga (los japos son expertos en eso), alguna filosofada suelta… Estoy seguro de que te va a gustar, no tengo la menor duda. Y espero no haberte aburrido.
Primer episodio
Pequepistas para entender de qué va esto
- Hachi-Roku: literalmente es “ocho-seis”, en alusión a AE86
- Kuruma: Coche
- San-Ni: “3-2”, es decir, R32
- Monstaru Machine: coche muy potente
- Sempai: compañero mayor que tú
- Papa: no tiene nada que ver con el significado que conoces, a ver si descubres por qué
- Onegai: Rogar, se lo ruego
- Tofu: alimento de origen vegetal asiático, más información en Wikipedia. Relacionado con la serie, el repartidor de Tofu no puede permitir que se vierta ni una sola gota, de ahí lo del vasito mientras corre
- Los japoneses tinen un sentido del honor muy estricto, sirve para entender la actitud de varios personajes
- El estilo de música de la BSO (en la jerga se llaman OST) es JPop, si te gusta, hay muchos CDs sueltos por la red, más de los que se pueden oir en una vida completa.
- 1000 Yenes son unos 6 euros
Y lo más importante de todo bajo ninguna circunstancia pruebes estas cosas en una carretera real, puede ser la última flipada que cometas en vida. Es bonito ver esto en ficción, pero en la realidad, fuera de circuito, no mola nada.
Fuente | Wikipedia en castellano y Wikipedia global
Más información en Wikipedia| Akira, Toyota AE86 (inglés), Anime, Manga, Temporadas y reviews de la serie
Capturas de pantalla | Nautiljon
En Motorpasión | Trailer de Initial D, la película